Bloomberg Línea — Salvador Nasralla (Partido Liberal) denunció un “fraude monumental” en las elecciones presidenciales del 30 de noviembre en Honduras, en las que está perdiendo con Nasry ‘Tito’ Asfura (Partido Nacional) por 42.407 sufragios, con base en el escrutinio del 99,40% de las actas.
Aunque los hondureños fueron citados a las urnas hace diez días, desde ese entonces desconocen quién gobernará al país centroamericano de 2026 a 2030.
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Primero, el Consejo Nacional Electoral (CNE) suspendió un conteo rápido de votos debido a un “empate técnico” entre Nasralla y Asfura. Después, interrumpió la publicación de resultados por cuenta de tres días de fallos en el software, aunque desde la noche del lunes reanudó la transmisión.
Asfura suma 1.298.835 votos (40,52%), mientras que su principal contendiente, Salvador Nasralla (Partido Liberal), acumula 1.256.428 (39,20%).
En ese contexto, Nasralla convocó a sus simpatizantes a las calles para protestar contra un “fraude monumental” y pidió un escrutinio “acta por acta” para conocer al ganador de los comicios.
“Nosotros queremos que se cuente voto por voto”, sostuvo desde Tegucigalpa.
El sitio web del CNE dice que de 19.052 actas transmitidas, 16.279 son “correctas” y 2.773 presentan “inconsistencias”, por lo que serán revisadas a partir del próximo miércoles. Pues bien, Nasralla dejó entrever que no confía en dicho repaso.
“El escrutinio especial también lo tienen arreglado, repito, el escrutinio especial que empieza mañana con 2.753 actas va a ser igualmenTe manoseado y manipulado, como nos han estado manoseando desde el 30 de noviembre”, dijo el aspirante del Partido Liberal. “Nuestro compromiso es defender la verdad de las actas físicas y exigir transparencia total en el escrutinio especial, Honduras merece un resultado electoral verificable, serio, sin secretos y de cara a la nación”.
Moncada y Castro, también inconformes
Nasralla, sin embargo, no es el único candidato inconforme con los resultados electorales parciales publicados por el CNE.
La candidata oficialista, Rixi Moncada (Partido Libertad y Fundación), anunció el lunes que no reconocerá al ganador de los comicios e invitó a la ciudadanía a marchar el 13 de noviembre.
“Libre no reconoce las elecciones celebradas bajo injerencia y coacción de Donald Trump y la oligarquía aliada que embistieron al pueblo con un golpe electoral”, dijo Moncada.
Por su parte, la presidenta de Honduras, Xiomara Castro, denunció la injerencia del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en los comicios presidenciales, luego de que anunciara públicamente su apoyo a Nasralla y asegurara que se entendería políticamente con él.
“Condeno la injerencia del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, cuando amenazó el pueblo hondureño, que si le daban el voto a Rixi Moncada, iban a tener consecuencias”, dijo Castro. “Esas declaraciones violaron el principio más grande de nuestra Constitución: la soberanía reside en el pueblo”.
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