Bloomberg — El expresidente Martín Vizcarra se convirtió en el último líder peruano sentenciado a prisión luego de que un tribunal local lo declarara culpable de corrupción y le ordenara cumplir 14 años de prisión.
Vizcarra aceptó más de US$600.000 en sobornos de empresas constructoras a cambio de contratos públicos mientras se desempeñó como gobernador de la región sureña de Moquegua entre 2011 y 2014, según el veredicto del tribunal.
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Fue elegido vicepresidente en 2016 y asumió el máximo cargo dos años después, cuando el presidente Pedro Pablo Kuczynski renunció tras una exitosa votación de destitución. El propio Kuczynski ha sido encarcelado, puesto bajo arresto domiciliario y posteriormente liberado mientras se enfrentaba a investigaciones por corrupción y lavado de dinero.
Otros tres expresidentes peruanos también se encuentran actualmente recluidos en una prisión especial construida para exjefes de Estado: Alejandro Toledo, condenado por aceptar un soborno multimillonario; Ollanta Humala, condenado por blanqueo de dinero; y Pedro Castillo, encarcelado mientras se le juzgaba por un presunto intento de golpe de Estado para mantenerse en el poder.
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