Bloomberg Línea — Lionel Messi, capitán de la selección argentina y figura del Inter Miami, ha convertido su carrera futbolística en una estructura de ingresos diversificada, apoyada en acuerdos e inversiones desarrolladas a lo largo de los años.
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Según el índice de riqueza de Bloomberg, Messi ha generado más de US$600 millones en salarios antes de impuestos a lo largo de su carrera.
Desde su llegada al Inter Miami en 2023, el argentino percibe US$20 millones anuales garantizados, dentro de un contrato que también incluye acuerdos comerciales asociados al desarrollo del negocio de la liga, que incrementan notablemente sus ingresos totales.
Entre esos acuerdos figura un modelo de reparto de ingresos con Apple, vinculado a los derechos de transmisión de la MLS.
Aunque sus ingresos fijos en las dos últimas temporadas representan solo una décima parte de lo que ha cobrado el delantero portugués Cristiano Ronaldo en el mismo período, ambos futbolistas se han beneficiado de una fuerte inflación salarial en la élite del deporte.
Las cifras acumuladas por ambos rebasan los ingresos de estrellas de generaciones anteriores. Por ejemplo, el inglés David Beckham cerró toda su carrera con ganancias cercanas a los US$100 millones antes de retirarse en 2013, una cantidad hoy superada con creces por los contratos y estructuras comerciales que definen al fútbol en la actualidad.
Para 2025, Messi ocupa el segundo lugar entre los futbolistas mejor pagados del mundo, con un ingreso anual estimado en US$130 millones, solo por detrás de Cristiano Ronaldo (US$280 millones), según Forbes.
De ese total, US$60 millones provienen de su actividad deportiva, mientras que US$70 millones corresponden a ingresos fuera del campo.
En paralelo, la llegada del argentino al Inter Miami CF en julio de 2023 impulsó de forma directa la valoración del club, que ronda los US$1.200 millones y lo sitúa entre los más valiosos de la liga estadounidense; además, el equipo le renovó contrato hasta 2028.
Además, los acuerdos publicitarios siguen siendo un pilar fundamental de su fortuna. Mantiene contratos de largo plazo con marcas como Adidas, Lay’s y Mastercard, que generan ingresos recurrentes más allá de campañas puntuales.
Negocios fuera del fútbol
El patrimonio de Messi no depende exclusivamente del deporte. En los últimos años, el futbolista ha reforzado su perfil como inversor a través de activos con proyección a largo plazo. Posee bienes inmobiliarios, participaciones privadas y empresas vinculadas al entretenimiento, la tecnología y el deporte.
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En 2024, el rosarino lanzó su propia bebida deportiva, Más+ by Messi, que ya se comercializa en Estados Unidos y se ha integrado a su ecosistema de negocios.
A ello se suma su participación en la cadena gastronómica El Club de la Milanesa, donde actúa como socio global y la consolidación de la línea hotelera MiM Hotels, desarrollada junto al Majestic Hotel Group desde 2017.
Entre ellas, The Messi Store, su marca de ropa y estilo de vida; 525 Rosario, su productora de contenidos audiovisuales; y Play Time Sports-Tech, firma de inversión con sede en EE.UU., orientada a proyectos deportivos y tecnológicos.
A la fortuna de Messi se suma la actividad empresarial de su esposa, Antonella Roccuzzo, quien ha desarrollado una carrera independiente como emprendedora y socia de marcas internacionales. Sus ingresos, estimados en alrededor de US$20 millones, complementan el patrimonio familiar.
