Bogotá — La guerra en Ucrania estalló en un momento de reactivación económica en el mundo, por lo que sus efectos, sumados al coletazo provocado por la crisis logística global, la alta inflación y las variaciones en el precio del petróleo, han generado disrupciones en el mercado.
El director de Inversiones de Credicorp, Arnoldo Casas, dijo a Bloomberg Línea que todas estas coyunturas “son una invitación a revisar los activos bajo una visión fundamental, a no salirse de las tendencias generales que gobiernan la economía y a entender todo este proceso como un termómetro temporal que desvía a los activos de su valor justo y que en el proceso, sin lugar a dudas, aparecen oportunidades que probablemente no se repitan en el tiempo”.
Casas dice que “toda esa incertidumbre y todo lo que gobierna la formación de los precios de los activos termina generando oportunidades. Por eso la volatilidad es amiga de la oportunidad”.
“Las tendencias de la sociedad y de la economía no van a cambiar, la población se está envejeciendo, la digitalización es inminente, la llegada de la inteligencia artificial es un hecho y ahí está el pie que uno tiene que poner en el futuro y que hoy en día muy seguramente se puede capturar en diferentes tipos de activos y a mejores precios”, agregó el especialista.
En este sentido, comentó que la demanda por instrumentos de renta fija en el largo plazo no va a cambiar porque cada vez habrá más pensionados. “Es una invitación a reflexionar sobre las tasas reales que tienen los instrumentos de renta fija, porque frente a estas coyunturas se está decantando en el precio una inflación de corto plazo que no guarda una relación con las tasas de interés reales de largo plazo”, apuntó.
Pero… ¿cómo capitalizar la actual volatilidad de los mercados? Sergio Olarte, economista principal Scotiabank Colpatria, dice que “a los mercados financieros la volatilidad les sirve: ya que entre mayor cambio de precios exista, las transacciones de compra y venta de activos se pueden aumentar. Lo importante es tratar de comprar lo más barato posible inversiones o activos y venderlos a mejor precio, para que efectivamente sea rentable”.
En este momento, “si se desea invertir en acciones, se podría pensar en aquellas que tienen que ver con el sector minero-energético que se podrían ver beneficiadas. Esta es una apuesta de corto plazo porque se debe esperar a ver qué pasa con el conflicto entre Ucrania y Rusia”, indicó.
Asimismo, dice que “definitivamente el mundo se está reactivando”, por ello “las inversiones que tienen que ver con alimentos y agroindustria también pueden verse beneficiadas”.
Por el lado de los bonos, “se tiene un escenario de subida de tasas de interés y si se quiere hacer una inversión de largo plazo y recoger los intereses de esa deuda: definitivamente hay que invertir en países que tienen un historial de pago de deuda y sostenibilidad fiscal y macroeconómica, como Colombia. Ahora, si lo que se desea es una inversión de corto plazo, hay que recordar que cuando las tasas de interés suben en el mercado secundario de bonos, los precios de los bonos caen, entonces la renta fija en este momento para inversiones de corto plazo no está siendo lo más óptimo para inversión”.
Un informe de Investopi, la academia de formación financiera para no financieros, da algunas claves en sentido frente a la coyuntura internacional y hechos concretos como las elecciones en países como Colombia.
“En momentos volátiles, en que los que las condiciones del mercado cambian constantemente, se abre un abanico de posibilidades para tomar decisiones financieras inteligentes y que generen un beneficio para el bolsillo”, dijo el autor del reporte y CEO de esta compañía, Marcelo Granada.
Investopi destaca la oportunidad de capitalizar oportunidades en el mercado bursátil de Estados Unidos, que tras experimentar un período alcista “hoy permite comprar acciones más baratas y dolarizar los ahorros”.
“Como consecuencia de los eventos recientes, el mercado de acciones en Estados Unidos ha sufrido una caída importante. Es posible verlo en el índice S&P 500, que representa al promedio de las 500 empresas más bursátiles de la bolsa de Nueva York”, explica.
A propósito de la incertidumbre en los mercados, señala que “cuando hay nerviosismo todo baja y esto significa una oportunidad para comprar y capitalizar”.
En el informe también se explica que es importante diversificar el portafolio con otros activos financieros, por lo que considera que se puede capitalizar la actual volatilidad apostándole, por ejemplo, a compañías de tecnología, retail, construcción, banca, finca raíz.
De otra parte, destaca que las criptomonedas siguen popularizándose y que en Colombia hay una clara necesidad de pensar mucho más globales.
Y es que a pesar de “estar viviendo momentos de relativa calma, debe considerarse que nadie está exento de ver afectada su estabilidad, como está sucediendo hoy en Ucrania”.
Desde Investopi señalan que “hay que tener un plan B y este puede ser las criptomonedas. El éxito está en prepararse y aprender e invertir en estos activos”, considerada una alternativa de riesgo ante las turbulencias que también vive ese mercado.
Por último, indica que “ahorrar ya no es suficiente” y “dejar el dinero quieto es perder también una posibilidad de rentabilizar dichos recursos, por eso es esencial aprender a invertir y formar un portafolio diverso y robusto”.
“Hoy en día, se puede invertir desde cualquier monto, en diferentes opciones, como comprar acciones en Wall Street, que me parece muy rentable en este momento dada la devaluación de Estados Unidos que causa que esas acciones estén más económicas”, indica Granada.
Arnoldo Casas, de Credicorp, complementa que “los precios de los activos no son otra cosa que un termómetro emocional del momento. Hoy con todas las circunstancias que estamos viviendo a nivel internacional, y también en el contexto local colombiano, es normal que los inversionistas estén inquietos frente a los desafíos que vienen”.
Sin lugar a dudas, “no hay ningún momento, ni ningún año en el cual el futuro está absolutamente claro y que sea predecible, siempre navegamos momentos en los cuales predecir el futuro es complicado, esa es una realidad de los mercados y es una realidad de la psicología inversionista”.
