Bloomberg — China fijó los aranceles definitivos a la importación de carne de cerdo de la Unión Europea (UE) en niveles significativamente más bajos que los anunciados inicialmente en septiembre.
Pekín impondrá gravámenes antidumping que oscilan entre el 4,9% y el 19,8% a la carne procedente de una de las mayores regiones proveedoras del mundo, según informó este martes el Ministerio de Comercio en un comunicado publicado en su página web. Los aranceles preliminares fijados en septiembre habían alcanzado el 62,4%.
Los aranceles, que entrarán en vigor el miércoles y se mantendrán durante cinco años, se ultimaron después de que Pekín determinara que la UE había estado practicando dumping con determinada carne de cerdo y subproductos porcinos, y que se había causado un daño sustancial a la industria nacional china, según el comunicado.
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“Técnicamente, esta resolución final supone una mejora en comparación con las tasas arancelarios preliminares, pero estas tasas definitivos seguirán añadiendo costes a las exportaciones europeas de carne de cerdo durante 5 años”, declaró Eva Gocsik, estratega global de proteínas animales de Rabobank. “Algunos procesadores seguirán viéndose afectados de forma desproporcionada. Al sector porcino europeo le espera un año difícil”.
China ha estado luchando contra el exceso de oferta de carne de cerdo y la atonía del consumo debido a una recesión económica sostenida. Incluso a niveles más bajos, los gravámenes suponen otro golpe para los atribulados porcinocultores europeos, que se enfrentan a la ralentización de la demanda y a las secuelas de los brotes de enfermedades.
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El principal exportador de carne de cerdo, Danish Crown A/S, y algunas unidades de Vion Food Group tendrán que hacer frente a unos derechos del 18,6% y el 19,8%, respectivamente, lo que supone una reducción de las tasas provisionales. No respondieron inmediatamente a las peticiones de comentarios.
Otras empresas también verán reducidos sus aranceles, según la resolución final.
China inició una investigación antidumping sobre los envíos procedentes del bloque el pasado mes de junio, como parte de una serie de contramedidas a las investigaciones de Bruselas sobre las subvenciones chinas en toda una serie de industrias. A principios de octubre, la UE votó a favor de imponer aranceles de hasta el 45% a los vehículos eléctricos procedentes de la nación asiática.
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