Bloomberg — Pacientes con Covid-19 están muriendo en los hospitales de Estados Unidos a niveles no vistos desde febrero, y las cifras podrían empeorar a medida que las unidades de cuidados intensivos se desbordan en algunas partes del sur del país.
En Alabama hay ahora más personas en las UCI de todo el estado que camas con personal disponible, según datos del Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS por sus siglas en inglés) de EE.UU. Florida, Misisipi, Georgia y Texas están utilizando más del 90% de su capacidad en las UCIs. Los pacientes con Covid-19 ocupan aproximadamente la mitad de las camas de UCI en esos estados, una cantidad extraordinaria para un solo diagnóstico.
La variante delta, de rápida propagación, ha alimentado la ola de Covid-19 que comenzó a azotar los Ozarks a finales de junio y se extendió por todo el país. Hay algunos indicios preliminares de que la oleada puede estar a punto de llegar a su punto álgido, especialmente en los focos originales, pero la situación sigue siendo grave en los hospitales, donde, según las autoridades, la gran mayoría de los pacientes con Covid-19 no están vacunados.
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La experiencia del Reino Unido con la variante Delta había dejado a muchos en EE.UU. con la esperanza de que la oleada fuera mucho menos mortal que las que la precedieron, incluso si produjera un elevado número de infecciones. Pero los datos preliminares sobre las muertes en los hospitales sugieren que podría no ser el caso. No hay duda de que sería mucho peor sin las vacunas, pero el virus sigue cobrando un precio alto. El número de personas que murieron en los hospitales de EE.UU. con Covid-19 confirmado o sospechoso aumentó en un promedio de siete días de 1.016 el miércoles, la mayor cantidad desde el 22 de febrero, según los datos del HHS.
Las muertes oficiales de Covid-19 pueden tardar semanas o más en notificarse. Los datos de mortalidad de los hospitales no tienen tal rezago, pero las cifras son diferentes de los recuentos oficiales, en los que se revisan los certificados de defunción. Aunque los pacientes tenían Covid-19 confirmado o sospechoso cuando murieron en el hospital, es posible que algunas de las muertes no fueran causadas por Covid-19.
