Bloomberg — Neuralink, la empresa de interfaces cerebro-ordenador fundada por Elon Musk, ha respondido a críticas sobre el trato que da a los monos en sus investigaciones, en momentos en que el bienestar de los animales es objeto de un mayor escrutinio.
La empresa, que está desarrollando un implante cerebral destinado a ayudar a tratar diversos trastornos neurológicos, se ha enfrentado a las críticas por supuesto maltrato a los monos utilizados en el proyecto. Neuralink desmintió las afirmaciones en un comunicado el lunes, insistiendo en su compromiso con el bienestar de los animales.
“Todos los dispositivos y tratamientos médicos novedosos deben probarse en animales antes de que puedan ensayarse éticamente en seres humanos”, afirmó la empresa, añadiendo que nunca ha recibido una citación del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA por sus siglas en inglés) tras las inspecciones de sus instalaciones y su programa de cuidado de animales.
Esto se produce tras la revelación de que el Physicians Committee for Responsible Medicine (Comité de Médicos por una Medicina Responsable), un grupo defensor de los derechos de los animales, presentó una queja ante el USDA contra la Universidad de California por lo que describió como “experimentos cerebrales invasivos y mortales realizados en 23 monos”.
Neuralink depende de la universidad, sede del Centro de Primates de Davis, para llevar a cabo el proyecto de investigación cerebral, ya que alberga y cuida a los monos utilizados en los experimentos.
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Este artículo fue traducido por Andrea González
