:quality(75)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/bloomberglinea/JRLOPKKJMBA2FBYA5DRR44I7QA.jpg "Estuvo afectada por vacaciones y contagios de coronavirus.")
Buenos Aires — La economía argentina comenzó el año con indicadores dispares en materia de actividad. La reactivación industrial experimentó un freno “transitorio” en enero, con una contracción del 4,4% desestacionalizado contra diciembre y del 3% interanual, según datos del Ministerio de Desarrollo Productivo.
El informe de la cartera a cargo de Matías Kulfas señaló que siete de 14 sectores industriales crecieron contra 2021 y la otra mitad se contrajo. En tanto, de 1.056 plantas industriales, el 52,5% consumió más energía que en enero de 2021.
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“Si bien la reactivación ha sido generalizada, dado que la mayoría de los sectores productivos está hoy por encima de fines de los últimos meses de la prepandemia, también ha sido muy heterogénea”, reconoció.
:quality(75)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/bloomberglinea/D37RC5DMVNGUHK5O7BQCSGQJTU.jpg "Fuente: Ministerio de Desarrollo Productivo.")
Además, al destacar la recuperación registrada el año pasado, evaluó que hubo una serie de sectores con un fuerte impacto en el peor momento de la pandemia, pero que repuntaron “rápidamente” para superar los niveles de 2019. “El caso emblemático aquí es la construcción que, tras caer más de 40%, cerró el año más de 10% por encima del nivel prepandemia”.
Los motivos de la caída de enero
“Son varias las razones detrás de la desaceleración industrial registrada en enero”, afirma el informe de la cartera conducida por Matías Kulfas. Si se tiene en cuenta que enero de 2021 “tuvo muchas menos paradas de planta que enero de 2022″, producto de que el año pasado diversas firmas intentaron recuperar las pérdidas de los meses de confinamiento de 2020, en los cuales habían otorgado vacaciones anticipadas.
“A modo de ejemplo, la producción automotriz cayó 23,3% interanual en enero, pero tuvo nueve días hábiles contra 17 durante el mismo mes de 2021, según ADEFA”, puntualizó el informe. Además, aseguró que “incidieron negativamente la tercera ola de COVID-19, que supuso un mayor ausentismo”, y, en menor medida, “algunos cortes programados de electricidad en la segunda semana de enero” ante las temperaturas récord en el país, que dispararon la demanda residencial.
El turismo, en alza
“La contracara de la desaceleración industrial de enero fue una continuidad de la recuperación del turismo interno”, destacó el sondeo oficial.
En tanto, remarcó que “la movilidad de la primera mitad de febrero de 2022 superó a la de enero del mismo año en la mayor parte de los destinos turísticos”. “Este incremento de la movilidad en la primera quincena de febrero podría responder a varios motivos, como la baja de contagios y, también, que la población local de las localidades turísticas haya veraneado en enero y ahora esté retornando a la vida cotidiana”, analizó.
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