Bloomberg — Las acciones estadounidenses subían en un amplio repunte, al tiempo que los inversores sopesaron la resistencia de la economía frente a las perspectivas de medidas políticas agresivas para frenar la inflación. Los rendimientos del Tesoro subieron a lo largo de toda la curva, mientras que el petróleo cayó por la preocupación relacionada a la demanda.
El S&P 500 se recuperó de su cierre más bajo en más de un mes, y los 11 principales grupos industriales avanzaron, excepto el energético. El Nasdaq 100, donde las tecnológicas tienen gran peso, subió más de un 2%, al igual que el índice Russell 2000, de pequeña capitalización. Los rendimientos de los bonos del Tesoro a corto plazo, que son los más sensibles a los cambios en las tasas de interés, lideraron la subida.
El presidente de la Fed de Chicago, Charles Evans, dijo el martes que las tasas de interés probablemente subirán por encima del nivel neutral. Los inversores, que ya apostaban por una subida de las tasas de casi medio punto el mes que viene, han reevaluado las expectativas después de que el presidente de la Fed de San Luis, James Bullard, dijera que no hay que descartar subidas de hasta 75 puntos básicos. La última subida de tal magnitud fue en 1994.
“En general, la mayoría de los mercados se centran en la rapidez con la que la Fed y otros bancos centrales van a ir, y en última instancia en qué tasa se van a tomar un respiro”, dijo por teléfono Brian Nick, estratega jefe de inversiones de Nuveen. “Sin embargo, detrás de todo esto está el hecho de que los datos económicos siguen siendo bastante sólidos”.
Los datos del gobierno mostraron el martes que la construcción de viviendas en Estados Unidos aumentó inesperadamente en marzo hasta el nivel más alto desde 2006.
La temporada de resultados continuó el martes, con Johnson & Johnson ganando después de reportar ganancias en el primer trimestre que superaron las estimaciones y aumentar su dividendo. El avance se produce a pesar de que la farmacéutica recortó su previsión de beneficios anuales y suspendió las previsiones de ventas de la vacuna Covid-19.
Hasta ahora, con sólo 48 empresas del S&P 500 que han presentado sus resultados, el 79% ha dado sorpresas positivas, según datos recopilados por Bloomberg.
El petróleo retrocedió, poniendo fin a una subida de cuatro días, ya que los operadores sopesaron las precarias perspectivas de la demanda. El cobre subió junto con otros metales básicos, ya que las interrupciones en las minas de Perú aumentaron la preocupación por la escasez de suministros en un momento en que los inventarios se encuentran en niveles alarmantemente bajos.
Las interrupciones de las cadenas de suministro por los confinamientos en China y los flujos de materias primas por la guerra de Ucrania han mantenido la presión sobre los bancos centrales para que frenen los precios desbocados en un momento en el que se prevé que el crecimiento mundial se ralentice. El Fondo Monetario Internacional recortó su previsión de crecimiento mundial al máximo desde los primeros meses de la pandemia, y proyectó una inflación aún más rápida.
