Bloomberg — Los rendimientos del Tesoro de los Estados Unidos aumentaron el martes de forma generalizada, siendo las tasas de la parte corta de la curva las que lideraban el camino al alza, mientras que la venta masiva de bonos impulsó el rendimiento del referencial a 30 años por encima del 3% por primera vez en tres años.
Las mayores presiones inflacionarias, impulsadas en parte por la guerra en Ucrania y los problemas de la cadena de suministro relacionados con la pandemia, han ayudado a aumentar las tasas de los bonos este año y han reforzado las expectativas de un endurecimiento de la política monetaria por parte de la Reserva Federal de EE.UU. Los funcionarios de la Fed se reunirán a principios de mayo y se espera que eleven su tasa interbancaria de referencia en 50 puntos básicos y se dan por hechos más aumentos en reuniones posteriores.
El rendimiento del bono a 30 años subió el martes hasta 6 puntos básicos a poco más del 3% y traspasó esa marca por primera vez desde abril de 2019. El bono a 20 años se convirtió el 11 de abril en el primer valor de referencia en traspasar el nivel del 3% en el ciclo actual de aumento de tasas.
La tasa a dos años subió hasta 11 puntos básicos a 2,56%, aplanando la curva de rendimiento.
Mientras tanto, los bonos de todo el mundo se tambaleaban ante la perspectiva de que los bancos centrales necesitarán endurecer la política monetaria fuertemente para contener la inflación vertiginosa. Los rendimientos a 10 años del Reino Unido estuvieron a punto de tocar el 2% por primera vez desde 2015, mientras que sus pares a cinco años subieron al nivel más alto desde las secuelas del fallido referéndum de independencia de Escocia en 2014. Los rendimientos de referencia alemanes estuvieron a menos de 10 puntos básicos de llegar al 1% por primera vez en siete años.
Los mercados monetarios, que ya apuestan por un aumento de las tasas de la Reserva Federal de casi medio punto el próximo mes, recibieron una llamada de atención el lunes del presidente de la Fed de San Luis, James Bullard, quien dijo que no se debe descartar un aumento de tres cuartos de punto en la tasa clave. El último aumento de tal magnitud fue en 1994.
Los operadores de todo el mundo están apostando por tasas de interés más altas. Esperan que los encargados de la política monetaria estadounidenses aumenten la tasa de los fondos federales en más de 200 puntos básicos para fin de año, además del alza de un cuarto de punto anunciada el mes pasado. Los mercados monetarios están apostando a que el Banco de Inglaterra aumentará la tasa en casi 150 puntos básicos, después de haberla endurecido tres cuartos de punto. Mientras tanto, se espera que el Banco Central Europeo (BCE) eleve los costos del endeudamiento un cuarto de punto en septiembre y diciembre.
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