Bloomberg — El FBI ha señalado que no se han producido ataques específicos a los sistemas de votación de estadounidenses para las próximos comicios de mitad de mandato, aunque los comentarios sobre la falta de fiabilidad de los resultados se amplifican a través de Internet, siendo Rusia el país que ejerce una mayor presión entre los adversarios foráneos.
Este tipo de material, impulsado en los estados por los candidatos políticos y otras personas en EE.UU., está siendo utilizado por los enemigos extranjeros para crear conflictos, dijeron funcionarios del FBI hoy en una rueda informativa con los periodistas en Washington. Según la Oficina Federal de Investigación, Rusia, China e Irán están interviniendo de forma ventajosa en el período que precede a las elecciones del 8 de noviembre para favorecer sus objetivos.
A juicio de la entidad, los participantes foráneos no precisan elaborar material polémico, como hizo Rusia para las elecciones estadounidenses de 2016. En su lugar, señaló que están utilizando los contenidos domésticos existentes en Estados Unidos, particularmente aquellos que expresan dudas sobre la legitimidad de sus elecciones.
Los rusos resultan ser los más dinámicos cuando se trata de detectar y sobrealimentar tópicos que puedan exacerbar las diferencias dentro de los Estados Unidos utilizando las redes sociales y otros métodos, bien mediante sus iniciativas o utilizando intermediarios, afirmaron los oficiales del FBI. Por ejemplo, el gobierno de Rusia ha utilizado la política de EE.UU. sobre la guerra emprendida por Moscú en contra de los ucranianos, que contempla la asistencia militar al país atacado, subrayando el impacto que el conflicto está teniendo sobre los precios energéticos.
El gobierno chino se ha centrado principalmente en esfuerzos más convencionales para promover sus intereses, pero está comenzando a tomar una página del libro de jugadas de Rusia para explotar las divisiones en los EE.UU., dijo el FBI.
El FBI dijo que no está interrogando a los estadounidenses sobre sus creencias para determinar si los mensajes amplificados en el extranjero están teniendo un impacto, ya que el contenido está cubierto por los derechos constitucionales de los EE.UU. En cambio, dijo la agencia, se centra en identificar intenciones y capacidades nefastas y proporcionar información a quienes pueden hacer uso de ella, como las empresas de redes sociales.
También está rastreando las amenazas a los trabajadores electorales en todo el país y ha investigado a más de 1000 de ellos desde junio de 2021, lo que ha llevado a cuatro arrestos hasta el momento, según las estadísticas de la oficina. Casi el 60% de las amenazas se produjeron en estados donde la controversia (y las teorías de conspiración) sobre los resultados de las elecciones de 2020 fueron más candentes, como Arizona, Georgia y Michigan.
Lea más en Bloomberg.com
