Bloomberg — La producción industrial de EE.UU. cayó en octubre más de lo esperado, en gran parte como consecuencia de la huelga de los fabricantes de automóviles y los proveedores de piezas de recambio.
La producción disminuyó un 0,7% el mes pasado, la mayor cifra en cuatro meses, lastrada por una caída del 10% en la producción de automóviles, según mostraron los datos de la Reserva Federal. Sin contar los automóviles, la industria manufacturera subió un 0,1%.
La producción industrial total, que incluye la minería y los servicios públicos, cayó un 0,6%.
A partir de septiembre, el sindicato United Auto Workers autorizó huelgas selectivas contra los tres grandes fabricantes de automóviles de Detroit, interrumpiendo la producción en las empresas y en sus proveedores. A finales de octubre, el sindicato llegó a un acuerdo provisional con la dirección de la empresa, lo que sentó las bases para un repunte de la producción en noviembre.
La tasa anualizada de ensamblaje de automóviles cayó a 9,22 millones de unidades, la menor desde febrero de 2022.
Los últimos sondeos de fábricas han indicado la tibieza de los nuevos pedidos, incluida la última encuesta de la Fed a los fabricantes de Nueva York, que también mostró una creciente preocupación por el futuro. De cara al futuro, las fábricas tendrán que seguir capeando el enfriamiento de la actividad económica en el extranjero, los elevados tipos de interés en casa y unas perspectivas económicas inciertas.
Las cifras del jueves mostraron que la utilización de la capacidad en las fábricas, una medida de la producción potencial utilizada, cayó al 77,2%, el nivel más bajo del año. La utilización global también disminuyó.
La producción de servicios públicos cayó por segundo mes consecutivo, mientras que la producción minera aumentó.
Por su parte, el índice de equipos de defensa y espaciales de la Reserva Federal subió un 1,7%, hasta alcanzar un nuevo récord.
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