Bloomberg — Venezuela detuvo a su máximo líder católico y confiscó su pasaporte justo cuando la opositora María Corina Machado atraía la atención internacional por recibir el Premio Nobel de la Paz.
El arzobispo católico Baltazar Porras fue retenido este miércoles durante varias horas en el aeropuerto de Maiquetía, en Caracas, cuando intentaba volar a Colombia de camino a España, según Provea, un grupo local de derechos humanos. Posteriormente fue liberado, pero los funcionarios del aeropuerto se quedaron con su pasaporte.
La medida se suma a la creciente tensión entre el gobierno del presidente Nicolás Maduro y la Iglesia católica, que cuenta entre sus miembros a la mayoría de los venezolanos. El difunto Hugo Chávez se enfrentó con frecuencia a los líderes eclesiásticos, calificando en una ocasión a la institución de “tumor” y describiendo a sus representantes como “diablos bajo sotanas” cuando arreciaban las críticas por sus políticas y su represión.
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“Este acto de acoso no es aislado y forma parte de una política para silenciar a cualquiera que sea percibido como opositor”, dijo Laura Dib, directora del programa de Venezuela en la Oficina de Washington para América Latina. “El gobierno autoritario de Maduro persigue voces críticas como la de Porras, incluso a la luz de la posición crítica de la Iglesia sobre las acciones de Trump en el Caribe”, añadió, refiriéndose a los ataques militares estadounidenses contra presuntos barcos de narcotraficantes.
El incidente se produjo el mismo día en que la líder opositora y rival de Maduro, Machado, recibió en Oslo el Premio Nobel de la Paz en reconocimiento a su lucha por la democracia y la libertad. Machado salió de Venezuela pero se retrasó por el mal tiempo, así que su hija aceptó el premio en su nombre.
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Bajo Maduro, las relaciones con la Iglesia han oscilado entre breves intentos de diálogo y enfrentamientos recurrentes. Incluso tras una reunión de “reconciliación” en 2021, Maduro llegó a tachar a Porras de “conspirador” después de que el arzobispo denunciara la corrupción venezolana, la injerencia institucional y los abusos de derechos en Roma, y criticara los casos de tortura bajo el gobierno.
Provea dijo que la retención o invalidación de documentos de identidad forma parte de un patrón más amplio de violaciones de derechos que se ha intensificado desde las elecciones presidenciales del año pasado.
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