Bloomberg — Casi cuatro de cada cinco empleados estadounidenses temen perder su trabajo durante una posible recesión, lo que apunta a un alto nivel de ansiedad en el ámbito laboral en medio de crecientes expectativas de una recesión económica.
Esto es lo que indica una encuesta reciente de la empresa de contratación de personal Insight Global, que también reveló que el 54% de los trabajadores aceptaría un recorte salarial si eso significara mantener su empleo. Una proporción similar no cree que su trabajo sea a prueba de recesión.
Cada vez son más los economistas que pronostican una recesión en los Estados Unidos en los próximos 12 meses, a medida que la Reserva Federal intensifica su lucha contra una inflación que está en su nivel más elevado en décadas. Los aumentos de precios están superando las alzas salariales y reduciendo el poder adquisitivo de los estadounidenses, lo que lleva a muchos a concluir que la recesión ya llegó.
Aun así, el mercado laboral ha seguido siendo un punto brillante, ya que se prevé que la tasa de desempleo de EE.UU. se mantenga en junio cerca del nivel más bajo en más de 50 años, cuando se publiquen los datos del gobierno el viernes. Los despidos son históricamente bajos, a pesar de los anuncios de recortes de empleo de empresas como Netflix Inc. (NFLX) y Tesla Inc. (TSLA).
Los estadounidenses tienen buenas razones para temer por su seguridad laboral: casi nueve de cada diez directivos dijeron que “probablemente” tendrían que despedir a empleados durante una recesión, según el sondeo realizado en junio, en el que participaron más de 1.000 trabajadores estadounidenses, en su mayoría de sectores de cuello blanco.
Hay indicios de que los trabajadores ya se están viendo presionados. Las solicitudes de subsidio de desempleo en EE.UU. aumentaron ligeramente la semana pasada hasta alcanzar el nivel más alto desde enero, lo que sugiere que la fortaleza del mercado laboral se está moderando.
Alrededor del 56% de los trabajadores estadounidenses dicen no sentirse preparados económicamente para una recesión o no saben cómo prepararse para una. Entre los grupos demográficos, las mujeres y los millennials son los que se sienten más inseguros.
