Bloomberg — El presidente de EE.UU., Joe Biden, dijo este viernes que los daños en al sistema de gasoductos Nord Stream en el Mar Báltico fueron un “acto deliberado de sabotaje” y que no se debe confiar en las declaraciones desde Rusia sobre el hecho. “Ahora los rusos están lanzando desinformación y mentiras”, dijo Biden a la prensa en la Casa Blanca.
“Estamos trabajando con nuestros aliados para llegar al fondo de lo que ocurrió exactamente y, bajo mi dirección, ya hemos empezado a ayudar a nuestros aliados a mejorar la protección de esta infraestructura crítica”, añadió.
Biden no aportó pruebas de la conclusión de EE.UU. de que las enormes columnas de gas natural provocadas por las recientes explosiones fueron el resultado de un sabotaje, pero dijo que EE.UU. planeaba enviar buzos para examinar el gasoducto y “averiguar exactamente lo que ocurrió”. Hasta ahora se han descubierto un total de cuatro fugas en los gasoductos Nord Stream 1 y Nord Stream 2, y distintos gobiernos europeos sugieren que las acciones fueron deliberadas.
El presidente ruso, Vladimir Putin, acusó el viernes a EE.UU. y a sus aliados de organizar las explosiones contra los gasoductos durante un discurso sobre su supuesta anexión de tierras ucranianas, pero no ofreció ninguna prueba que corroborara sus acusaciones. Biden negó rotundamente la responsabilidad de EE.UU.
“No escuchen lo que dice Putin”, dijo Biden. “Sabemos que no es cierto”.
Biden también dijo que EE.UU. y el mundo no reconocerían el intento de anexión de Rusia ni se dejarían “intimidar por Putin y sus imprudentes palabras y amenazas.”
“No puede apoderarse del territorio de su vecino y salirse con la suya”, dijo Biden. “Es tan simple como eso”.
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