El viaje de Xi a Europa reaviva la división del continente: principales conclusiones

Bloomberg — Aparte de oportunidades para tomarse fotografías y probar algunas delicias locales, el presidente chino Xi Jinping no consiguió, ni dio, mucho durante sus dos días en Francia con el presidente Emmanuel Macron esta semana. Sin embargo, el viaje de Xi por Europa del Este resultó más productivo, permitiéndole agregar a Serbia a la lista de países que apoyan su visión del orden global e inclinarse hacia la cada vez más tensa relación entre Hungría y la Unión Europea.

Aunque Xi habló sobre evitar una “nueva Guerra Fría”, su diplomacia ha revivido las divisiones de la anterior, enfrentando al este de Europa contra el oeste. Aquí hay algunas de las principales conclusiones del viaje y lo que se debe observar en los próximos meses:

Sin acuerdos en Francia

Macron esperaba que, al construir una conexión personal más estrecha, pudiera persuadir al líder chino de influir en Vladimir Putin para poner fin a la guerra de Rusia en Ucrania. Pero Xi no ha cambiado mucho la postura de China. “China entiende las repercusiones de la crisis en Ucrania en la gente de Europa”, escribió en un artículo de opinión publicado en el periódico francés Le Figaro. Eso es lo máximo de empatía que Xi ha mostrado desde el inicio del conflicto.

La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, quien se unió a una reunión trilateral en París, también destacó la “naturaleza existencial” de la guerra. Xi luego se opuso a la presión de Bruselas y advirtió contra el uso del conflicto como una herramienta para criticar a China.

Si Xi tenía la esperanza de crear una división entre la Unión Europea y Estados Unidos, no tuvo mucho éxito. Después de una reunión con Xi, von der Leyen dijo que el bloque está preparado para utilizar todas las herramientas disponibles para contrarrestar lo que ella llamó prácticas comerciales injustas de China, que siguen siendo una preocupación en Estados Unidos. Xi ha negado categóricamente tales afirmaciones.

Ser amable genera más yuanes

Xi anunció una serie de nuevas inversiones en Budapest mientras elogiaba a Viktor Orban, primer ministro de Hungría, como un modelo de cómo podría ser la relación de la Unión Europea con la segunda economía más grande del mundo. También llevó promesas de construir infraestructuras que ayudarán a difundir productos en el bloque comercial desde fábricas chinas planeadas para Hungría. BYD Co., el gigante chino de vehículos eléctricos, eligió previamente el país como sede de su primera fábrica de automóviles en Europa; también es un centro de producción de baterías.

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El gobierno de Hungría, que tiene problemas de liquidez, ha estado buscando asegurar financiamiento y estímulo fresco para su economía. Entre los acuerdos se encuentra dinero para una costosa actualización de la antigua red ferroviaria del país y la construcción de una conexión largamente demorada entre el aeropuerto de Budapest y el centro de la capital, según el ministro de Asuntos Exteriores, Peter Szijjarto. Hungría también buscará profundizar la cooperación con Huawei para avanzar en la digitalización en el país.

Sin límites con Serbia

El presidente serbio, Aleksandar Vucic, le dio a Xi una gran recepción en Belgrado, con una multitud vitoreando y agitando banderas nacionales. La escena fue una victoria publicitaria para él en China, al igual que los agasajos de Xi en Francia, que incluso se convirtieron en un tema de tendencia en la plataforma de redes sociales Weibo.

Vucic declaró que “el cielo es el límite” entre los dos países, un eco de la amistad “sin límites” de Moscú con Pekín (y tal vez un recordatorio del apoyo a Rusia y su agenda). Xi también hizo que Serbia se sumara a ser una “comunidad con un futuro compartido”, convirtiéndose en el primer país europeo en unirse a los esfuerzos de China para construir una coalición que desafíe el orden mundial liderado por Estados Unidos.

Como muestra de los beneficios económicos que un socio amistoso podría obtener de China, Xi dijo que un Acuerdo de Libre Comercio con Serbia entrará en vigencia el 1 de julio, y agregó que su nación aumentará las importaciones de productos agrícolas y comenzará más vuelos directos. Los bancos centrales de los dos países también trabajarán en un acuerdo de compensación en yuanes para fortalecer sus vínculos empresariales y comerciales. Serbia también dice que mantendrá una parte de sus reservas de divisas en yuanes, proporcional a la deuda de la nación con China, que está aumentando.

Girando hacia el este, nuevamente

En Hungría, Xi elogió las políticas exteriores “independientes” de Orban, y pidió a Budapest que lidere las relaciones de la región con China. Los medios estatales chinos fueron tan lejos como para llamar a Hungría “la nación más occidental de las naciones orientales”, en un intento de resaltar las similitudes culturales entre los dos países. (No hay muchas.)

No es el primer intento de China de dividir al bloque. Beijing estableció un mecanismo para fortalecer los lazos con 16 naciones de Europa central y oriental en 2012. Pero el entusiasmo por el marco se fue desvaneciendo gradualmente; los países se mostraron irritados por los crecientes desequilibrios comerciales, mientras que China tampoco cumplió con sus promesas de miles de millones de dólares en inversiones. (Luego llegó la invasión de Ucrania por parte de Rusia, que provocó una reevaluación más amplia de las relaciones con China). Lituania y tres naciones bálticas han anunciado formalmente su decisión de abandonar el formato, lo que lo vuelve obsoleto.

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En Belgrado, Xi también prometió “no olvidar nunca” el bombardeo de la embajada china por parte de las fuerzas de la OTAN en el 25avo aniversario del ataque. Misiles estadounidenses mataron a tres periodistas chinos en un ataque de 1999 que la Casa Blanca calificó más tarde como un error y atribuyó a mapas defectuosos. Xi no pareció haber visitado el sitio de la antigua embajada.

Lo que sigue

China y Francia firmaron 18 acuerdos de cooperación bilateral durante la visita de Xi. Es probable que haya una tregua en el coñac; el Ministerio de Comercio de China inició una investigación antidumping sobre productos de licor de la Unión Europea a principios de este año, en respuesta a que la UE abrió una investigación sobre los subsidios de vehículos eléctricos de China en octubre pasado.

La UE puede imponer subsidios provisionales a los vehículos eléctricos después de nueve meses, por lo que se acerca el plazo de julio. Xi también dijo que China “da la bienvenida” a los productos agrícolas y cosméticos franceses, pero si las disputas sobre la capacidad de fabricación excesiva de China evolucionan hacia una guerra comercial, estas áreas podrían convertirse fácilmente en los próximos objetivos.

Y en cuanto a Ucrania, la visita próxima de Putin a Pekín mostrará cuánto pudo haber influido Macron en Xi.

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