Bloomberg — La compañía Ford Motor Co. (F) ha empezado a reducir los pedidos a sus proveedores de baterías para contener las cada vez mayores pérdidas generadas por sus VE, según fuentes conocedoras del proceso, al tiempo que disminuye sus pretensiones en un mercado en rápida desaceleración para los modelos enchufables.
Sin embargo, Fotd continúa sus relaciones con los fabricantes de baterías, que incluyen a las surcoreanas SK On Co. y LG Energy Solution Ltd., además de la china Contemporary Amperex Technology Co. Ltd. (CATL), indicaron las fuentes, que prefirieron no ser citadas por tratarse de decisiones internas.
Este movimiento se enmarca dentro de la estrategia de la compañía para los VE, que incluye la disminución del gasto en US$12.000 millones en sus modelos impulsados por baterías, el retrasar el lanzamiento de nuevos VE, el reducir los precios y el aplazar y reducir el tamaño de las fábricas de baterías planeadas.
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La compañía ha previsto unas pérdidas en VE de hasta US$5.500 millones en este año y su CEO, Jim Farley, ha dicho hace poco que su unidad de vehículos eléctricos, el Model e, “es el mayor problema de la empresa en estos momentos”.
Un vocero de Ford indicó que la empresa no suele hacer comentarios respecto a sus relaciones o términos con proveedores.
CATL manifestó que su “colaboración con Ford se desarrolla con normalidad”, sin ofrecer más explicaciones. SK On y LG dijeron que sus contratos con Ford continúan en pie, si bien no aludieron de forma inmediata a la eventualidad de que se modifiquen los pedidos.
A medida que los precios de los vehículos eléctricos se desplomaron y la demanda se redujo, las pérdidas de Ford por vehículo eléctrico superaron los US$100.000 en el primer trimestre, más del doble del déficit del año pasado, dijo una de las personas.
Bloomberg Intelligence estima que las pérdidas que Ford espera sufrir en su unidad de vehículos eléctricos este año estarán cerca de eliminar las ganancias que obtiene de su división Ford Blue, que fabrica vehículos tradicionales con motor de combustión interna como el SUV Bronco e híbridos de gasolina y electricidad como el camión Maverick .
“Esto plantea dudas sobre la prudencia de invertir fuertemente en vehículos eléctricos”, escribieron los analistas de BI Steve Man y Peter Lau en una nota de investigación del 3 de mayo.
La reducción de los pedidos es una nueva señal de los dolores de cabeza que aquejan a la industria. Los fabricantes de automóviles en EE.UU. se enfrentan a una demanda de vehículos eléctricos que sigue estando por debajo de las expectativas.
Mientras tanto, los fabricantes de baterías en Corea del Sur, China y otros lugares están lidiando con una acumulación de inventario no vendido.
Esto, a su vez, está repercutiendo aún más en la cadena de suministro y afectando los precios de metales clave como el litio, el cobalto y el níquel, que este año se han comercializado en mínimos de varios años, paralizando las decisiones de inversión en nuevos proyectos y, en algunos casos, provocando cierres de minas.
Los funcionarios de Ford dicen que han recortado miles de dólares en costos de sus vehículos eléctricos para tratar de hacerlos rentables, pero también han tenido que recortar los precios para seguir siendo competitivos frente al líder del mercado Tesla Inc. (TSLA), que ha descontado agresivamente sus modelos.
“Hemos visto que los precios bajaban dramáticamente y es por eso que no hemos podido mantener el ritmo desde el punto de vista de la reducción de costos”, dijo a los analistas John Lawler, director financiero de Ford, el 24 de abril en la conferencia telefónica sobre ganancias de la compañía. “Pero nuestro objetivo es eliminar tanto costo como podamos este año en el Modelo e y todo con el espíritu de avanzar hacia ese margen de contribución positivo”.
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Lawler fue ascendido a vicepresidente el viernes para centrarse en la estrategia a largo plazo y ayudar a encontrar una manera de frenar las pérdidas de vehículos eléctricos.
Ford está acelerando el desarrollo de vehículos eléctricos pequeños que comenzarán en US$$25.000 y debutarán a fines de 2026, informó Bloomberg . Farley ha dicho que esos modelos serán rentables durante su primer año en el mercado.
Encontrar un camino hacia la rentabilidad de los vehículos eléctricos es fundamental para la supervivencia a largo plazo de la empresa, dijo Lawler en una entrevista este mes.
“Modelo e tiene que valerse por sí misma”, afirmó. “Tiene que ser rentable y proporcionar un retorno del capital que estamos invirtiendo”.
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