Bloomberg — El presidente estadounidense, Joe Biden, dijo que Cuba debe respetar el derecho de reunión pacífica después de que miles de manifestantes llenaran las calles en toda la nación isleña para protestar contra el régimen y pedir acceso a vacunas contra el coronavirus y alimentos.
“Apoyamos al pueblo cubano y su claro llamado a la libertad y al alivio del trágico efecto de la pandemia y de las décadas de represión y sufrimiento económico a las que ha sido sometido por el régimen autoritario de Cuba”, dijo Biden el lunes (12 de julio) en un comunicado.
El presidente de Estados Unidos continuó con un llamado al Gobierno de Cuba a que “escuche a su gente y atienda sus necesidades en este momento vital en lugar de enriquecerse”.
Videos publicados en las redes sociales durante el fin de semana mostraron ataques de la Policía a los manifestantes. Durante un discurso televisado, el presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, pidió a sus partidarios enfrentarse a los manifestantes en las calles.
El comunicado de Biden se produce después de críticas de algunos legisladores republicanos, que aprovecharon un tuit publicado el domingo por la subsecretaria de Estado interina, Julie Chung, quien describió las protestas como orientadas en torno a “la preocupación por el aumento de casos y muertes por covid y la escasez de medicamentos”.
En una serie de tuits y videos publicados en la red social, el senador Marco Rubio, un republicano de Florida, dijo que era “ridículo” enmarcar las manifestaciones “simplemente en torno al covid”. Rubio también criticó a Biden por no comentar antes sobre las protestas.
Los demócratas han enfrentado dificultades con los votantes cubanoamericanos en los últimos años; los republicanos a menudo criticaban los intentos del expresidente Barack Obama por normalizar las relaciones diplomáticas con Cuba. El expresidente Donald Trump ganó la mayoría de los votos cubanoamericanos de Florida en las elecciones de 2020, según las encuestas a boca de urna, y la sólida actuación del republicano en el condado de Miami-Dade ayudó a impulsarlo a la victoria en el estado.
