Justo & Bueno: acreedores están en vilo por el futuro de la cadena colombiana

Bogotá — Un grupo de acreedores de Justo & Bueno expresó su molestia por los presuntos incumplimientos y preocupación por el futuro de la cadena de descuento colombiana, que se encuentra inmersa en un proceso de reorganización del que aún no encuentra el camino de salida.

La Superintendencia de Sociedades informó este viernes que ayer se presentaron en las instalaciones de la entidad “un grupo de personas que se identificaron como acreedores” de Justo & Bueno para “plantear su situación actual”.

“Funcionarios de la entidad, encabezados por el superintendente de Sociedades, Billy Escobar Pérez, recibieron una comisión representativa para explicarles cómo funcionan los procesos de insolvencia, con el fin de que los acreedores puedan tener información de primera mano sobre las funciones de la entidad, y entender su estado actual”, indicó.

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Medios locales informaron este viernes que más de 1.300 propietarios de los locales comerciales que ocupa la cadena de descuento se quejaron porque presuntamente les adeudan $120.000 millones en todo el país.

Incluso, en redes sociales se divulgó un video de uno de estos en los que muestra la situación en una bodega de la marca ubicada en sur de Bogotá para exponer que supuestamente esta se encuentra “desocupada”, pero “insisten en tener abierto con estanterías desocupadas”.

Justo & Bueno indicó que “es muy preocupante la situación de los propietarios de los locales de sus tiendas y es consciente sobre las dificultades que se están viviendo. Su gran prioridad siempre ha sido y es trabajar por su recuperación y así poder encontrar una solución responsable para todos”.

“Con el objetivo principal de mantener la operación de la compañía, ya se avanza en un plan de salvamento que incluye un esquema fiduciario para aislar el riesgo de los nuevos despachos de inventario y garantizar el pago a todos sus arrendadores y proveedores”, agregó en un comunicado.

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Aclaró frente a la situación de los dueños de los locales “que las normas concursales y comerciales protegen la continuidad del negocio y, en ese sentido, evitan el desmembramiento de la empresa, mientras se resuelve judicialmente la reorganización”.

“En todo caso, una vez iniciado el proceso de reorganización bajo la Ley 1116 de 2006, la empresa debe estar al día porque esa protección desaparece si hay incumplimientos en los pagos. Justo & Bueno reitera su compromiso de continuar trabajando sin descanso para atender los compromisos que tiene la compañía con los propietarios de los locales”, apuntó.

La Superintendencia de Sociedades aceptó a Justo & Bueno el pasado 12 de mayo en el trámite de Negociación de Emergencia de Acuerdos de Reorganización (NEAR) en los términos del Decreto Ley 560 de 2020.

Sin embargo, “se declaró el fracasó del mismo, puesto que la sociedad indicó que no había logrado obtener una financiación para cumplir con los pagos previstos en el acuerdo de reorganización presentado, así como de los gastos de administración”.

Según la entidad, este proceso se encuentra pendiente de cierre, debido a que se presentaron diferentes recursos interpuestos por algunos de los acreedores.

Y si bien ya fueron resueltos por el juez, “se está a la espera de la firmeza de la decisión”, y aun cuando este trámite no haya sido exitoso, “los interesados pueden acudir a las distintas opciones de carácter legal dispuestas en la normativa de insolvencia vigente”.

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