Bloomberg — Tras deshacerse de la mayoría de los ejecutivos de Twitter a su llegada, Elon Musk ha comenzado a formar un nuevo grupo de líderes en la red social.
La empresa comenzó a hacer cambios en sus equipos esta semana tras llevar a cabo despidos masivos que terminaron con alrededor de la mitad de los empleos de Twitter.
Entre los gerentes que permanecen en la empresa, algunos han comenzado a emerger como líderes de secciones internas clave mientras Musk busca cambiar rápidamente la red social.
El ascenso de un nuevo liderazgo bajo el mando de Musk ha proporcionado al menos un atisbo de estabilidad interna tras dos semanas de caos. El más visible entre la nueva guardia ha sido Yoel Roth, un veterano de Twitter que depende de Musk y que ahora dirige todos los esfuerzos de Confianza y Seguridad de la compañía -algunos de los cuales anteriormente recaían en otros ejecutivos, según personas familiarizadas con el asunto. Esto incluye políticas de contenido, esfuerzos electorales y planes para luchar contra el spam y las cuentas falsas.
Roth ha estado enviando hilos de tweets con regularidad para compartir detalles sobre los esfuerzos de Twitter para luchar contra la desinformación electoral, un área que preocupa a muchos críticos, ya que los cambios de la compañía se produjeron en la víspera de la votación de mitad de período en Estados Unidos. Roth también ha intentado explicar los planes del sitio en torno a la verificación de cuentas, que han evolucionado a un ritmo vertiginoso. Musk ha retuiteado y respondido a las publicaciones de Roth, y ha animado a otros a leerlas, una señal para los seguidores de que Roth es alguien en quien el multimillonario confía para comunicar el mensaje de la empresa.
En cuanto a los productos, Behnam Rezaei, que figura como director senior de ingeniería de Twitter en su LinkedIn, supervisa ahora todo el desarrollo de ingeniería y productos, reportando directamente a Musk, según varias personas con conocimiento del asunto que pidieron no ser identificadas porque no están autorizadas a hablar en nombre de la compañía. Anteriormente, Twitter separó sus grupos de productos en tres organizaciones: Bluebird, el grupo de productos de consumo; Goldbird, el grupo de productos generadores de ingresos; y Redbird, un grupo de productos de ingeniería e infraestructura. Estas divisiones ya no existen, según varias personas.
Las divisiones de marketing y ventas de Twitter están ahora a cargo de Robin Wheeler, dijeron las personas. Wheeler, una vicepresidenta de ventas que también depende de Musk, ha estado dirigiendo los esfuerzos de la red social para calmar las preocupaciones de los anunciantes sobre su marca y sus políticas de contenido. El miércoles, organizó una reunión al estilo ayuntamiento en Twitter Spaces con Musk.
La sesión estaba destinada a los anunciantes, pero llegó a una audiencia de más de 100.000 oyentes. La semana pasada, Wheeler presentó a Musk durante una llamada privada separada con un grupo de asesores de marketing y los principales directores de marketing de otras empresas, dijeron personas familiarizadas con el asunto.
Wheeler se mostró firme durante la sesión de preguntas y respuestas de los y no rehuyó hacer preguntas difíciles a Musk. Dijo que representaba las preocupaciones de los anunciantes e indagó sobre temas tan espinosos como la incitación al odio, la seguridad de la marca y la forma en que la compañía planea abordar la moderación de contenidos.
La nueva estructura de la compañía todavía se está elaborando, y es posible -incluso probable- que las cosas sigan cambiando, dijeron personas familiarizadas. Musk todavía no se ha dirigido al personal de Twitter en un memorando de la empresa o en una reunión de todos los empleados y no ha hecho ningún anuncio formal sobre el nuevo liderazgo desde que asumió el cargo.
Musk, que se nombró a sí mismo “Tuitero en jefe” tras su adquisición, sigue recibiendo algunos consejos y asesoramiento de un grupo de amigos cercanos y antiguos colegas, dijeron personas con conocimiento del asunto. Eso incluye a su ex colega de PayPal David Sacks; el amigo e inversor Jason Calacanis; el socio de Andreessen Horowitz Sriram Krishnan; el inversor y miembro de la junta directiva de SpaceX Antonio Gracias; y Alex Spiro, el abogado de Musk.
Este grupo, que fue más activo en el período inmediatamente posterior al cierre del acuerdo, ha ayudado a asesorar a Musk en todo, desde ideas de productos hasta despidos y la nueva dirección de Twitter, dijeron las personas. Por ejemplo, Rezaei y otros ingenieros que están entrando repentinamente en puestos de responsabilidad en Twitter trabajaron estrechamente con Krishnan cuando éste formaba parte del personal de la empresa hace unos años.
Sacks, por su parte, trató recientemente de sugerir que su papel en Twitter no es formal, tuiteando: “No tengo un papel oficial. No estoy “a cargo” de nada. Hago lo que los inversores intentan hacer en Silicon Valley, que es ser útil en los márgenes”.
La división legal de Twitter también está sin resolver, y no está claro quién asumirá finalmente el cargo de consejero general. Spiro, el abogado de Musk y una pieza clave en su batalla judicial para abandonar el acuerdo de US$44.000 millones, ha estado ayudando al equipo legal mientras tanto, dijeron personas familiarizadas.
Incluso si las cosas se equilibran después del frenesí de la transición inicial, Twitter está todavía lejos de ser estable. Se espera que Musk, que también dirige Tesla Inc. (TSLA) y SpaceX, acabe contratando a un CEO, o a alguien con un título similar, para que le ayude a dirigir las operaciones diarias de la empresa de redes sociales.
Hasta entonces, Musk parece tomar rápidamente la mayoría de las decisiones por sí mismo, y su Twitter sigue siendo el megáfono central para comunicarlas.
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