Bloomberg — Apple Inc. (AAPL) llegó a un punto decisivo en su esfuerzo de una década por construir un automóvil y optó por un diseño menos ambicioso con la intención de sacar finalmente un vehículo eléctrico al mercado.
Después de imaginar un auténtico auto sin conductor, la compañía ahora está trabajando en un vehículo eléctrico con características más limitadas, según fuentes con conocimiento del proyecto.
Aun así, el objetivo de Apple de fijar una fecha de lanzamiento sigue retrasándose. Con los últimos cambios, la compañía espera presentar el automóvil en 2028, aproximadamente dos años después de una proyección reciente, dijeron las fuentes, que pidieron no ser identificadas porque las deliberaciones son privadas. Una portavoz de Apple declinó hacer comentarios sobre los planes de la empresa.
El esfuerzo secreto de Apple por crear un automóvil es una de las iniciativas más ambiciosas de su historia, y una de las más turbulentas. Desde que empezó a tomar forma en 2014, el proyecto —cuyos nombres en clave son Titan y T172— ha visto ir y venir a varios jefes. Ha habido múltiples rondas de despidos, cambios cruciales en la estrategia y numerosos retrasos.
Pero sigue siendo una de las grandes apuestas de la compañía, una categoría completamente nueva para el fabricante de dispositivos que podría ayudar a revitalizar el crecimiento de las ventas. Los ingresos de Apple se estancaron el año pasado ante la madurez del sector de los teléfonos inteligentes y la desaceleración de la economía china, su mayor mercado exterior.
Pero Apple ha tenido problemas con la forma de abordar un producto de este tipo. A finales de 2022, la empresa con sede en Cupertino, California, pretendía lanzar un automóvil en 2026 con funciones avanzadas de conducción autónoma para autopistas.
Ahora, después de descubrir que no sería capaz de terminar un vehículo de este tipo en un futuro previsible, Apple está desarrollando funciones de asistencia al conductor más básicas en línea con las capacidades actuales de Tesla Inc. (TSLA), según las fuentes citadas. El vehículo utilizará lo que se conoce como un sistema de nivel 2+, dijeron las personas. Se trata de una rebaja con respecto a la tecnología de nivel 4 prevista anteriormente y, antes de eso, a los objetivos aún más ambiciosos de un sistema de nivel 5.
Internamente, el cambio se considera un momento crucial para el automóvil de Apple: o la compañía finalmente es capaz de lanzar este producto con expectativas reducidas o los altos ejecutivos podrían reconsiderar seriamente la existencia del proyecto, dijeron las personas. Aun así, es posible que Apple vuelva a dar marcha atrás y adopte un nuevo rumbo.
El diseño anterior del vehículo contemplaba un sistema que no requiriera intervención humana en las autopistas de zonas aprobadas de Norteamérica y que pudiera funcionar en la mayoría de las condiciones. El plan más básico de nivel 2+ requeriría que los conductores prestaran atención a la carretera y tomaran el control en cualquier momento, de forma similar a la actual función Autopilot de los vehículos eléctricos de Tesla.
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