Bloomberg — El presidente argentino, Javier Milei, no cree que su Gobierno dolarice la economía antes de las elecciones de medio término del próximo año, lo que ofrece el primer indicio de un cronograma de su propuesta económica más ambiciosa de la campaña.
“No creo que lleguemos para las elecciones del año que viene, pero la meta, como tal, existe”, dijo Milei —quien asumió el cargo el 10 de diciembre— a CNN en Español en una entrevista grabada que se transmitió el domingo por la noche.
Javier Milei interviewed by CNN | The left, in its different versions, is the cancer of humanity
— DutchLibertarian (@LibertarianDuty) April 1, 2024
(Credits to @Arg_Investment ) pic.twitter.com/wVYmbpgeCl
Milei había dicho anteriormente que la dolarización se produciría después de que su Gobierno saneara el balance del banco central y reformara el sistema financiero del país, sin detallar fechas. Si bien Milei insistió durante la entrevista en que aboga por una “libre competencia de monedas”, admitió que el dólar estadounidense probablemente sería la moneda más fuerte en circulación.
Milei añadió que está trabajando en una reforma del sistema financiero que servirá como un paso clave para cerrar eventualmente el banco central, otro de los pilares de su plan económico. Milei no proporcionó detalles sobre la reforma ni de su cronograma, pero reiteró la necesidad de cerrar la autoridad monetaria en algún momento.
“Nosotros podemos hacer todas las reformas que sean, pero si usted deja vivo el banco central, los delincuentes de la política tarde o temprano van a querer usarlo para estafar a la población”, sostuvo Milei.
El presidente libertario criticó a los políticos por robar de forma “grosera y violenta” a los ciudadanos, refiriéndose a la idea de que la impresión de dinero sin restricciones por parte del banco central ha colocado a la inflación argentina entre las más altas del mundo.
Durante la misma entrevista —de la cual se habían publicado fragmentos durante la semana previa— Milei criticó a varios líderes latinoamericanos, incluido el presidente colombiano, Gustavo Petro. Después de llamarlo “terrorista, asesino y comunista”, el Gobierno de Colombia expulsó a los funcionarios de la embajada de Argentina.
El domingo por la noche, las cancillerías de Colombia y Argentina emitieron un comunicado conjunto en el que señalaron que “han mantenido conversaciones para afianzar las relaciones diplomáticas, acorde con las tradicionales relaciones de fraternidad, civilidad y los vínculos entre ambos pueblos en los planos político, comercial, cultural e institucional” y que la ministra de Relaciones Exteriores de Argentina, Diana Mondino, visitaría Bogotá pronto.
Lea más en Bloomberg.com
