Bloomberg — La administración del presidente Donald Trump ha lanzado un sitio web para un programa de visas para los ricos, un esfuerzo largamente esperado para alentar a los adinerados a emigrar a EE.UU. ofreciendo permisos de residencia a cambio de un alto precio.
Las personas pueden pagar un millón de dólares para obtener la residencia estadounidense con la “Tarjeta Dorada Trump”, tras pagar una tarifa de procesamiento y una verificación de antecedentes, según el sitio web que anuncia el programa. Próximamente estará disponible una “Tarjeta Platino” por US$5 millones, que permitirá a los beneficiarios “pasar hasta 270 días en Estados Unidos sin estar sujetos a impuestos estadounidenses sobre ingresos no estadounidenses”.
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Las empresas que aporten US$2 millones podrán recibir la residencia estadounidense para un número indeterminado de sus empleados, según la página web.
“La Tarjeta Dorada Corporativa Trump permite a su empresa transferir el acceso de un empleado y concedérselo a otro, con el costo de una tasa de transferencia y la investigación del DHS. También se aplicará una pequeña cuota anual de mantenimiento”, dice la página web, en referencia al Departamento de Seguridad Nacional.
Trump insinuó por primera vez la idea de la tarjeta dorada en febrero, promocionando el concepto junto con el secretario de Comercio, Howard Lutnick, como una iniciativa que ayudaría a atraer inversión de capital y crear empleos, a la vez que generaría ingresos para reducir el déficit. Lutnick acompañó a Trump en un evento en la Casa Blanca el viernes para anunciar la iniciativa.
Las visas para los megaricos forman parte de los esfuerzos de Trump por reformar el sistema migratorio del país, intensificando las deportaciones de inmigrantes indocumentados. Trump ha declarado su deseo de ampliar las vías legales para obtener la ciudadanía, en particular para las personas con altos ingresos.
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El anuncio se produce en un momento en el que Trump también se dispone a revisar a fondo el programa de visados H-1B, exigiendo una tasa de US$100.000 para las solicitudes en un intento de frenar su uso excesivo. Esta medida haría mucho más caro para las empresas tecnológicas y otras emplear a ingenieros extranjeros y otros trabajadores cualificados para cubrir puestos de trabajo muy demandados.
Trump ha previsto que hasta un millón de personas adquieran las tarjetas, pero los expertos en inmigración han dicho que el grupo de individuos que podrían permitirse participar en el programa es mucho menor.
Con la ayuda de Jason Leopold.
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