:quality(75)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/bloomberglinea/6GHWCUFR2JEGFIUNYUWIK2DVQU.jpg "Justo está, además, en países como Chile, Colombia, México, Perú y Costa Rica.")
QUITO — Justo, la startup chilena fundada en 2018, inicia oficialmente sus operaciones en Ecuador. Con una inversión inicial de aproximadamente US$ 1 millón, Ecuador se suma a otros cinco países donde está presente la marca, cuyo objetivo es ser partner tecnológico de restaurantes y comercios.
Mercados como Chile, Colombia, México, Perú y Costa Rica han alcanzado más de 10 mil restaurantes asociados y uno de sus propósitos es llegar a un millón de órdenes este 2022 en la región.
El objetivo de Justo es “democratizar la tecnología mediante la creación de estrategias digitales 360°, que inician con la creación de una plataforma e-commerce autoadministrable y fácil de usar, alineada a la visión y necesidad de cada restaurante”, señala un comunicado de la marca.
Otro de sus servicios es el servicio de delivery de última milla, conectando así a los restaurantes con una flota de motorizados confiable y que hoy cuenta con más de 75 mil conductores para garantizar la entrega de los pedidos. Finalmente, un grupo de profesionales en marketing digital crean novedosas campañas, permitiendo acelerar las ventas de los restaurantes.
Actualmente, en Ecuador existen más de 250 restaurantes partners de Justo con independencia tecnológica. Uno de ellos es Grupo Stav, que tiene control de la información que les provee su propio e-commerce y ha logrado impulsar su actividad económica conectando directamente con sus clientes.
“Nos sentimos muy honrados de empezar nuestras operaciones en Ecuador, pues creemos que es un país con grandes oportunidades de crecimiento económico. Con nuestra tecnología y acompañamiento, el sector restaurantero tendrá la oportunidad de palpar una verdadera recuperación postpandemia”, dijo Rodrigo Segal, CEO de Justo Latam.
Asimismo, agregó que su objetivo “es que el principal canal de venta de los restaurantes y comercios sea el propio”, pues a diferencia de las delivery apps, “nosotros redireccionamos al cliente hacia el restaurante. Una vez que entregamos la tecnología, estamos en constante seguimiento de toda su operación, pero el restaurante siempre tendrá el control, pondrá precios y subirá promociones o banners. Es decir, es su plataforma, pero con nuestro soporte”.
