Bloomberg — Las solicitudes continuas de beneficios por desempleo en Estados Unidos subieron a su nivel más alto desde principios de febrero, lo que sugiere que los estadounidenses que pierden el empleo tienen más dificultades para encontrar un nuevo trabajo a medida que el mercado laboral muestra signos tentativos de enfriamiento.
Las solicitudes continuas, que incluye a las personas que ya han recibido beneficios por desempleo durante una semana o más, aumentaron en 62.000 a 1,7 millones en la semana que finalizó el 26 de noviembre, según datos del Departamento del Trabajo publicados el jueves.
Las solicitudes iniciales de subsidio por desempleo registraron un incremento de 4.000 a 230.000 en la semana que finalizó el 3 de diciembre. La cifra estuvo en línea con la mediana de las estimaciones de los economistas encuestados por Bloomberg.
Los datos pueden variar de una semana a otra, especialmente durante la temporada de fiestas de fin de año. El promedio móvil de cuatro semanas, que atenúa esta volatilidad, subió a 230.000.
¿Anuncio de crisis?
En las últimas semanas, los economistas han prestado más atención a las solicitudes continuas de subsidio de desempleo, ya que son un indicador de lo difícil que resulta encontrar trabajo después de perderlo. También se sabe que son un indicio de próximas recesiones. Aunque el indicador ha aumentado en los dos últimos meses, sigue cerca de mínimos históricos.
Las solicitudes continuas han encadenado los tres mayores aumentos desde mayo de 2020.
Otros datos apuntan a lo que sigue siendo un mercado laboral en gran medida ajustado, marcado por una sólida creación de empleo y el aumento de los salarios, mientras que otros sectores han estado luchando bajo las agresivas subidas de tipos de interés de la Reserva Federal. Sin embargo, los despidos están aumentando en la banca y la tecnología, y algunas industrias como el comercio minorista recortaron personal el mes pasado.
En cifras no ajustadas, las solicitudes iniciales de subsidio de desempleo registraron la mayor subida desde principios de año, hasta 286.436 la semana pasada. California, Nueva York y Texas registraron los mayores aumentos.
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