El 2023 fue un mal año para las startups, con quiebras y valoraciones más bajas: informe

“No se puede endulzar demasiado, 2023 fue un año duro para las startups”, dijo Peter Walker, jefe de visión de Carta Inc., empresa de gestión de capitales

El 2023 fue un mal año para las startups, con quiebras y valoraciones más bajas: informe
Por Jessica Nix
30 de noviembre, 2023 | 02:56 PM

Bloomberg — Ha sido un año brutal para las startups, con más empresas luchando por conseguir dinero y cientos cerrando por completo, según nuevos datos.

En lo que va de 2023, el 19% de todas las rondas de financiación de startups recaudaron dinero con una valoración para la empresa inferior a la que les habían concedido previamente los inversores. Esta cifra es superior al 5% de 2021, según un informe de la empresa de gestión de capital Carta Inc.

“No se puede endulzar demasiado, 2023 fue un año duro para las startups”, dijo Peter Walker, jefe de visión de Carta.

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El aumento de las tasas de interés resultó ser un problema para la economía de las startups, dijo Walker. El comienzo de 2023 estuvo marcado por recortes masivos de empleo y una caída en picado de las inversiones, y muchos inversores de capital riesgo advirtieron de que las empresas se verían obligadas a aceptar valoraciones más bajas a medida que avanzara el año. La inteligencia artificial parecía el único punto brillante para las startups, ya que la financiación de empresas relacionadas aumentó por encima de cualquier otra categoría tecnológica y alcanzó los 17.900 millones de dólares, según datos de PitchBook.

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En lo que va de año, 543 startups cerraron sus puertas por quiebra o disolución, según Carta. En el tercer trimestre fiscal se produjeron 212 cierres, la cifra más alta desde que la empresa empezó a registrar los datos. El año pasado cerraron 467 empresas.

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Sin embargo, muchos inversores creen que el sector de las empresas emergentes, en plena crisis, tiene un lado positivo. El aumento de las rondas a la baja podría significar que las altísimas valoraciones están volviendo a la tierra después de alcanzar máximos poco realistas durante el auge alimentado por la pandemia de los últimos años. Los fundadores también se verán obligados a operar en un entorno económico más frugal, que fomentará una mayor disciplina y contención del gasto.

“Es un buen momento para crear una empresa, pero difícil para hacerla crecer, porque la gente está atrapada en este latigazo”, afirma Walker.

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