Biden se dispone a prohibir importaciones de petróleo ruso tan pronto como hoy

El país actuará sin sus aliados europeos. La medida incluirá al petróleo, el gas natural licuado y el carbón

Joe Biden
Por Annmarie Hordern, Jennifer Jacobs y Saleha Mohsin
08 de marzo, 2022 | 08:17 AM

Bloomberg — El gobierno de Joe Biden se dispone a imponer una prohibición a las importaciones de energía rusa tan pronto como el martes y sin la participación de sus aliados europeos, de acuerdo con personas familiarizadas con el asunto.

La prohibición incluirá el petróleo, el gas natural licuado y el carbón, de acuerdo a las personas, que hablaron bajo condición de anonimato. La decisión fue consultada con los aliados europeos, que tienen mayor dependencia de la energía rusa que EE.UU., dijo otra persona.

Las personas hablaron en condicion de anonimato de cara a la medida debido a su sensibilidad. Voceros del Consejo Nacional de Seguridad de la Casa Blanca rechazaron comentar de inmediato.

Los futuros del crudo ampliaron las ganancias tras la noticia, subiendo un 4% a US$124,21 a las 8:19 horas en Nueva York. La perspectiva de una prohibición de las importaciones de petróleo está ayudando a impulsar el crudo a sus niveles más altos desde 2008.

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El movimiento acelerado se produce cuando el Congreso se había preparado para tomar medidas esta semana antes que la Casa Blanca. Eso presionó a la administración de Biden para que se moviera más rápidamente.

El petróleo y gas de Rusia habían evitado, en mayor medida, las sanciones impuestas por EE.UU. y los países europeos debido a preocupaciones por su impacto económico, especialmente en Europa, que tiene una mayor dependencia del petróleo ruso y, en particular, del gas natural. Canadá ha anunciado una prohibición del crudo ruso, aunque la medida fue mayormente simbólica dado que el país no ha realizado importaciones de esa naturaleza desde 2019.

La Casa Blanca dijo el lunes que no se había tomado ninguna decisión.

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“Esas discusiones están en curso internamente y también con nuestros homólogos y socios en Europa y en todo el mundo”, dijo la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki. Europa importa mucho más petróleo de Rusia que Estados Unidos, dijo. “Así que, obviamente, también somos muy conscientes mientras tenemos estas conversaciones y mientras consultamos con nuestros socios de que habría... tenemos diferentes capacidades y posibilidades”.

El petróleo ruso representó alrededor de 3% de todos los cargamentos de crudo que llegaron a EE.UU. el año pasado, según muestra información de EE.UU. En total, las importaciones de petróleo y productos de petróleo representaron el 8% del total de EE.UU. Las importaciones de crudo ruso en 2022 han caído a su nivel anual más bajo desde 2017, de acuerdo a la empresa de análisis Kpler.

Rusia es, con diferencia, el mayor exportador de crudo a la Unión Europea, con un 27% de las importaciones en 2019, según la Comisión Europea.

Mientras que las llamadas autosanciones han limitado algunas compras de barriles rusos, una prohibición total por parte de EE.UU. tensaría aún más el mercado y aumentaría la volatilidad, haciendo que los precios suban aún más.

Aun así, Estados Unidos es un comprador relativamente menor que Europa y el mayor riesgo de que los precios suban reside en una acción coordinada entre Estados Unidos y Europa. Por el momento, el mercado ha descontado gran parte del impacto de la prohibición estadounidense durante el fin de semana y en las operaciones del lunes, lo que ha llevado al barril de referencia a casi US$140. Los operadores dicen que la cuestión ahora es saber cuánto dura la prohibición y si el petróleo de Irán y Venezuela podría ayudar a llenar el vacío.

Funcionarios de la Administración han dicho en conversaciones privadas que deberían hacer hincapié en los esfuerzos para acelerar la transición a las energías renovables y ampliar la producción energética nacional, según dos personas familiarizadas con las conversaciones. Pero la Casa Blanca no está planeando ninguna iniciativa nueva.

Los funcionarios de la administración han estado discutiendo con la industria del petróleo y el gas de Estados Unidos cómo una prohibición podría afectar a los consumidores estadounidenses y a los suministros energéticos mundiales, mientras los legisladores de ambos partidos en Washington se apresuran a avanzar en los proyectos de ley que prohíben las importaciones de petróleo ruso para castigar al Kremlin por su invasión de Ucrania.

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Los líderes del Congreso ya se están moviendo para forzar a la administración en este asunto. La legislación para prohibir las importaciones de crudo ruso ganó fuerza rápidamente entre republicanos y demócratas en el Capitolio. El personal del Congreso perfeccionó el texto durante el fin de semana y preparándose para una votación en la Cámara de Representantes tan pronto como el miércoles.

La presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, dijo el domingo en una nota a los legisladores que la Cámara está “explorando una legislación fuerte” que prohibiría la importación de petróleo y productos energéticos rusos, entre otras medidas para aislar a Rusia de la economía mundial. La presión para actuar aumentó después de que el presidente Volodymyr Zelenskiy pidiera a los legisladores que prohibieran la importación de petróleo ruso durante una llamada el sábado.

Los funcionarios de la administración de Biden pidieron el lunes a Pelosi que esperara, en medio de la creciente preocupación de que era importante políticamente que la Casa Blanca se moviera primero, dijeron las dos personas. El enfoque administrativo también da a Biden más flexibilidad para ajustar los controles de importación más tarde si las tensiones se alivian o los precios suben precipitadamente.

En una señal de que Estados Unidos está tratando de reunir otras fuentes de energía, dos altos funcionarios estadounidenses se reunieron durante el fin de semana con miembros del gobierno del presidente venezolano Nicolás Maduro en Caracas para discutir los suministros mundiales de petróleo y los vínculos del país con Rusia, según personas familiarizadas con el asunto.

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