Bloomberg — La inflación anual de México se desaceleró en línea con las expectativas en octubre, lo que le da al Banco de México cierto margen de maniobra mientras se prepara para una de sus últimas decisiones sobre tasas de interés del año.
Los precios al consumidor aumentaron un 4,26% en octubre en comparación con el mismo período del año anterior, frente al 4,45% en septiembre, informó el jueves 9 de noviembre el Instituto Nacional de Geografía y Estadística (INEGI).
La cifra coincidió con la estimación mediana de los analistas encuestados por Bloomberg.
Banxico, como se conoce al banco central de México, publicará su decisión sobre las tasas de interés de noviembre más tarde este mismo día.
Los analistas esperan que los miembros de la junta mantengan los costos de endeudamiento en 11,25% por quinta reunión consecutiva mientras persisten las preocupaciones sobre la inflación. Se espera que la declaración sobre política monetaria, que es la penúltima del año, siga siendo agresiva.
“La tendencia a la desinflación continuará incluso si hay presiones temporales”, dijo Andrés Abadía, economista jefe para América Latina de Pantheon Macroeconomics. “Si se excluyen los factores estacionales, hay una clara tendencia a la baja, incluso si recientemente ha habido cierta rigidez”.
La fuerte economía de México, que los analistas en la última encuesta de Citi publicada esta semana esperan que se expanda un 3,4% este año, ha sido un motor de la inflación. Al mismo tiempo, los niveles de desempleo han estado en mínimos históricos a medida que la inversión privada ha fluido hacia los estados del norte con un historial de exportaciones a Estados Unidos.
Se espera que la decisión del banco esté influenciada en parte por la inflación subyacente, que se desaceleró a 5,5%, aproximadamente en línea con la estimación mediana de 5,49%, y ha sido una preocupación durante mucho tiempo para los miembros de la junta directiva. El banco central tiene como objetivo una inflación del 3%, más o menos un punto porcentual.
“El Banco de México está jugando el mismo juego que los países desarrollados, que están utilizando la orientación futura para señalar que van a subir por más tiempo para gestionar las expectativas del mercado”, dijo Joan Enric Domene Camacho, director de América Latina de Oxford Economics, quien predijo un primer recorte a principios de 2024.
Se espera que los precios de la energía sean uno de los factores volátiles que las autoridades podrían observar en los próximos meses. Una inflación no subyacente con tendencia al alza podría llevar al banco central a mantenerse a la defensiva, escribieron los analistas de Citi Juan Andrés Páez y Ernesto Revilla en una nota a principios de esta semana.
Banxico ha estado atento a la Reserva Federal de Estados Unidos, que en su última decisión hizo que los mayores costos de endeudamiento pareciera improbable, aunque no los descartó.
“El tono del Banco de México se ha movido en la misma dirección que el de la Reserva Federal. Para mí es importante ver si, en los detalles, puede influir en el tono del Banco de México”, dijo Jessica Roldán, economista jefe de Casa de Bolsa Finamex.
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