Bloomberg — El secretario de Estado, Marco Rubio, calificó la cooperación de Venezuela con narcotraficantes y terroristas como una amenaza directa a la seguridad nacional de Estados Unidos, pero se negó a decir si Estados Unidos está tratando de sacar del poder al presidente Nicolás Maduro.
En declaraciones a los periodistas en una rueda de prensa de fin de año el viernes, Rubio también puso en duda la negociación con el líder venezolano, diciendo que Estados Unidos no sería capaz de llegar a un acuerdo con “esta gente, así como tampoco puede llegar a un acuerdo de paz con la mafia”.
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Aún así, se negó a descartar que EE.UU. impulse un cambio de régimen y no quiso decir si EE.UU. buscaría la aprobación del Congreso para posibles ataques terrestres contra el país, diciendo que no iba a comentar “cosas que no han sucedido y que puede que nunca sucedan”.
“El statu quo actual del régimen venezolano es intolerable para Estados Unidos: el statu quo de que operen y cooperen con organizaciones terroristas en contra del interés nacional de Estados Unidos”, dijo Rubio. “Así que sí, nuestro objetivo es cambiar esa dinámica”.
El presidente Donald Trump no ha dejado de aumentar la presión sobre Venezuela, con una campaña de mortíferos ataques aéreos contra presuntos narcotraficantes, con la incautación de un petrolero sancionado cargado de petróleo venezolano y luego con el anuncio de un bloqueo de todos los petroleros sancionados que entran y salen de Venezuela. También ha dicho que los ataques terrestres pueden ser los siguientes.
Esto ha generado especulaciones de que su administración está allanando el camino para una acción militar para derrocar a Maduro. En declaraciones a Vanity Fair publicadas esta semana, la jefa de gabinete de la Casa Blanca, Susie Wiles, afirmó que Trump “quiere seguir destruyendo barcos hasta que Maduro se rinda”.
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Rubio declinó comentar los comentarios de Wiles. Dijo que EE.UU. está preparado para usar su poder para proteger sus intereses - sin decir cómo podría ser eso.
“Nadie puede negar que la delincuencia transnacional y el terrorismo en nuestro hemisferio representan una amenaza para el interés nacional de Estados Unidos”, declaró Rubio. “Nos reservamos el derecho, y tenemos el derecho, de utilizar todos los recursos del poder nacional para defender el interés nacional de Estados Unidos. Y nadie puede discutirlo”.
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