Bloomberg — El presidente Donald Trump está cada vez más frustrado con Ucrania y Rusia por las demoras en las negociaciones de un acuerdo de alto el fuego, dijo su portavoz, lo que aumenta la presión sobre los funcionarios en Kiev que rechazaron una propuesta anterior de Estados Unidos considerada demasiado complaciente con Moscú.
“El presidente está extremadamente frustrado con ambas partes de esta guerra, y está harto de reuniones por el mero hecho de reunirse”, dijo el jueves a la prensa la portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt. “No quiere más conversaciones. Quiere acción”.
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Leavitt no se pronunció sobre si Estados Unidos enviaría a alguien a la reunión del fin de semana entre Ucrania y varias naciones europeas sobre la última oferta estadounidense, que es una versión reducida de un plan anterior de 28 puntos que habría exigido concesiones masivas por parte de Ucrania.
A primera hora del jueves, el presidente ucraniano, Volodymyr Zelenskiy, dejó entrever la posibilidad de permitir que los ucranianos votaran sobre la entrega de la región del Donbás a Rusia. El Kremlin ha insistido en que Ucrania retire sus fuerzas de los territorios orientales, que incluyen zonas de las regiones de Donetsk y Luhansk que el ejército ruso no ha logrado capturar en su invasión de casi cuatro años.
Zelenskiy había presentado anteriormente una nueva versión de un plan de paz a la Casa Blanca, tras las conversaciones mantenidas esta semana con los principales socios europeos. El borrador de 20 puntos es un “documento fundamental” para poner fin a la guerra, dijo Zelenskiy.
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El territorio ucraniano está en el centro de las continuas discusiones entre Washington, Kiev y Moscú, mientras los negociadores se acercan a un posible acuerdo para poner fin a la guerra.
El reto de Zelenskiy es que Moscú sigue ganando terreno de forma lenta pero constante, lo que da al presidente Vladimir Putin pocos incentivos para poner fin a la invasión. Ucrania, mientras tanto, ha perdido un importante apoyo militar y financiero estadounidense con Trump en la presidencia, y su ejército se enfrenta a una grave escasez de mano de obra.
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