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El presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, respaldó una subida de la tasa de interés de un cuarto de punto este mes para iniciar una serie de incrementos y se mostró abierto a una mayor si la inflación sigue siendo demasiado elevada, a pesar de la incertidumbre provocada por la invasión de Rusia en Ucrania.
“Me inclino a proponer y apoyar una subida de tipos de 25 puntos básicos”, dijo Powell el miércoles ante la Comisión de Servicios Financieros de la Cámara de Representantes. “En la medida en que la inflación llegue a ser más alta o sea más persistentemente alta que eso, entonces estaríamos preparados para movernos más agresivamente subiendo la tasa de fondos federales en más de 25 puntos básicos en una o varias reuniones”.
Los funcionarios de la Reserva Federal se están movilizando para hacer frente a la inflación más rápida de los últimos 40 años. Aunque reconoció la incertidumbre que supone el ataque a Ucrania, Powell dijo que la necesidad de eliminar la política de apoyo a la pandemia no había cambiado.
“Con una inflación muy por encima del 2% y un mercado laboral fuerte, esperamos que sea apropiado elevar el rango objetivo de la tasa de fondos federales en nuestra reunión de este mes”, dijo Powell el miércoles en declaraciones preparadas para su comparecencia ante el Comité de Servicios Financieros de la Cámara de Representantes. “El proceso de eliminar la política acomodaticia en las circunstancias actuales implicará tanto aumentos en el rango objetivo de la tasa de los fondos federales como la reducción del tamaño del balance de la Reserva Federal”.
Powell dijo que el mercado laboral está “extremadamente ajustado”, esencialmente un mensaje a los legisladores de que el banco central ha cumplido su objetivo de empleo máximo en las condiciones actuales, lo que abre la puerta a su lucha contra la inflación. Dijo que los empleadores están teniendo dificultades para cubrir las vacantes de empleo, mientras que los trabajadores están renunciando y aceptando nuevos puestos de trabajo ayudando a que los salarios aumenten al ritmo más rápido en años.
“Sabemos que lo mejor que podemos hacer para apoyar un mercado laboral fuerte es promover una larga expansión, y eso sólo es posible en un entorno de estabilidad de precios”, dijo Powell, reafirmando una línea que ha utilizado ya varias veces y que interpreta la lucha contra la inflación en términos de preservar la expansión.
“Gran incertidumbre”
Los mercados financieros se han tambaleado desde la invasión rusa a Ucrania, lo que ha hecho saltar los precios de la energía y potencialmente impulsado la inflación, incluso cuando las crecientes tensiones enturbian las perspectivas de crecimiento mundial. Aun así, los mercados de futuros de tasas de interés prevén un aumento de de un cuarto de punto a finales de este mes y varios funcionarios de la Reserva Federal que han hablado desde la invasión han dicho que todavía están dispuestos a actuar.
Powell advirtió, sin embargo, que los “efectos a corto plazo en la economía de Estados Unidos de la invasión de Ucrania, la guerra en curso, las sanciones, y de los acontecimientos por venir, siguen siendo muy inciertos.”
“Hacer una política monetaria adecuada en este entorno requiere reconocer que la economía evoluciona de forma inesperada”, dijo. “Tendremos que ser ágiles para responder a los datos entrantes y a la evolución de las perspectivas”.
Sin plazos concretos
El presidente de la Reserva Federal no dio ningún plazo para la reducción del balance, una decisión que probablemente aún esté pendiente del Comité Federal de Mercado Abierto. Una vez que se inicien las subidas de tasas, el recorte de activos “procederá de manera predecible principalmente a través de ajustes en la reinversión”, dijo.
Powell, cuya confirmación para un segundo mandato se ha visto estancada por la oposición de los republicanos a la selección por parte del presidente Joe Biden de Sarah Bloom Raskin para la vicepresidencia de supervisión, se enfrenta al reto de hacer pivotar la política para hacer frente a la inflación más alta de los últimos 40 años, al tiempo que no se endurece tanto como para que la economía se estanque.
Los críticos, incluidos algunos legisladores republicanos, dicen que el banco central estadounidense ha sido demasiado lento a la hora de actuar.
El indicador preferido de la Fed para medir la evolución de los precios subió a un ritmo anual del 6,1% en enero, el triple del objetivo del banco central del 2%. La demanda sigue siendo fuerte, con unas previsiones de crecimiento que se sitúan en torno al 2,9% este año, según estimaciones recogidas por Bloomberg, mientras que las empresas siguen incorporando empleados a un ritmo robusto. Mientras tanto, algunos de los colegas de Powell ven una necesidad urgente de subir las tasas, con el gobernador Christopher Waller pidiendo 100 puntos básicos de endurecimiento para mediados de año.
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