Bloomberg — El presidente Donald Trump decidió el viernes eximir el grafito, el tungsteno, el uranio, los lingotes de oro y otros metales de los aranceles vigentes en su país, al tiempo que sometió los productos de silicona a los mismos.
Los cambios entrarán en vigor el lunes en virtud de una orden ejecutiva emitida el viernes.
La directiva de Trump también podría acelerar la aplicación de acuerdos comerciales a medida entre EE.UU. y otros países, facilitando que Washington levante los aranceles sobre piezas de aviones, productos farmacéuticos genéricos y ciertos productos que no pueden cultivarse, extraerse o producirse de forma natural en el país, como especias especiales y café, así como metales oscuros.
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La medida formaliza un plan para eximir de aranceles a los lingotes de oro, después de que hace semanas una resolución de la Oficina de Aduanas y Protección de Fronteras de EE.UU. dejara atónitos a los comerciantes y causara confusión al indicar que los lingotes estarían sujetos a impuestos de importación.
Los cambios se hicieron siguiendo las recomendaciones de funcionarios estadounidenses, dice la orden del presidente. Según la medida, “estas modificaciones son necesarias y apropiadas para hacer frente a la emergencia nacional” que Trump declaró por primera vez al imponer sus aranceles por países en abril.
Según el cambio de procedimiento, el Representante de Comercio de EE.UU. y el Departamento de Comercio estarían facultados para tomar medidas para aplicar acuerdos marco con otras naciones, como los acuerdos que Trump ha firmado con la Unión Europea, Japón y Corea del Sur. Eso eliminaría la necesidad de que Trump promulgue esos cambios a través de sus propias órdenes ejecutivas.
Los aranceles globales de Trump son la pieza central de su amplio esfuerzo por abordar los desequilibrios comerciales que ha denunciado como una amenaza para la seguridad nacional. Antes de aumentar docenas de tarifas específicas por país el mes pasado, el presidente llegó a acuerdos con varias economías para fijar tarifas más bajas a cambio de que las capitales extranjeras eliminaran las barreras a los productos estadounidenses.
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Se están eliminando los aranceles recíprocos para una gran cantidad de minerales, incluidos materiales críticos utilizados en la industria aeroespacial, la electrónica de consumo, los dispositivos médicos y otras tecnologías.
Los productos farmacéuticos como la pseudoefedrina, los antibióticos y otros medicamentos —que ya son objeto de una investigación comercial independiente en curso por parte del Departamento de Comercio— también están recibiendo un nuevo alivio.
Además de los productos de silicona, el presidente está ampliando sus aranceles recíprocos a la resina y al hidróxido de aluminio.
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