Exempleado de Twitter es condenado por espiar para Arabia Saudita

La fiscalía dice que Ahmad Abouammo fue sobornado por un alto asesor de Mohammed bin Salman, gobernante de facto de Arabia Saudita, para ayudarlo a silenciar a sus críticos

Sede de Twitter en San Francisco, California, Estados Unidos, el jueves 21 de abril de 2022.
Por Joel Rosenblatt y Robert Burnson
09 de agosto, 2022 | 06:49 PM

Bloomberg — Un exempleado de la red social Twitter Inc. (TWTR) fue condenado en un tribunal de California por espiar para Arabia Saudita al entregar información personal de usuarios de la plataforma que habían utilizado nombres anónimos para criticar al Reino y a su familia real.

VER +
Príncipe saudí da marcha atrás en Twitter por su “nuevo amigo” Musk

Ahmad Abouammo, residente en los Estados Unidos y nacido en Egipto, fue declarado culpable el martes por un jurado de los cargos de actuar como agente de Arabia Saudita, blanqueo de dinero, conspiración para cometer fraude electrónico y falsificación de registros, tras un juicio de dos semanas en el tribunal federal de San Francisco. Enfrenta una condena de entre 10 y 20 años de prisión.

Abouammo, gerente de asociaciones de medios de comunicación de Twitter en 2015, sostuvo que simplemente estaba haciendo su trabajo de promoción de la naciente red de medios sociales en Oriente Medio y el Norte de África. Los fiscales alegaron que su relación con un alto ayudante de Mohammed bin Salman, o MBS, ahora el gobernante de facto de Arabia Saudita, fue mucho más allá -y más oscura- para ayudar al príncipe heredero a silenciar a sus críticos.

Al jurado se le mostraron pruebas de que Abouammo recibió un reloj Hublot y US$300.000 en transferencias bancarias que según Estados Unidos fueron sobornos del ayudante de MBS, Bader Al- Asaker, a cambio de información confidencial de cuentas de Twitter sobre disidentes saudíes.

PUBLICIDAD

El juicio se desarrolló con el telón de fondo del choque de puños del presidente Joe Biden con el príncipe heredero a mediados de julio en un intento de fortalecer las relaciones con Arabia Saudita, a la que Biden calificó en ese entonces de nación “paria” después de que sus agentes asesinaran y desmembraran al periodista del Washington Post Jamal Khashoggi en 2018.

A los fiscales se les prohibió, por decisión judicial, decir a los jurados explícitamente que EE.UU. y las organizaciones de derechos humanos creen que Arabia Saudita, bajo el mando de MBS, ha detenido y torturado en secreto a sus críticos.

Pero insinuaron las prácticas brutales a través de un testigo experto que testificó sobre la política y la cultura cambiante de Arabia Saudita, y a través de una mujer que dijo a los miembros del jurado que su hermano guardó silencio en 2018 después de publicar críticas satíricas al país en Twitter.

PUBLICIDAD

Angela Chuang, una defensora pública federal que representa a Abouammo, dijo a los jurados que el caso era producto de una investigación mal conducida, y del manejo descuidado de Twitter de los datos de sus usuarios. EE.UU. permitió que el verdadero objetivo de su investigación, el presunto co-conspirador de Abouammo, Ali Alzabarah, que trabajaba en Twitter como ingeniero, huyera a Arabia Saudita a pesar de estar bajo vigilancia, dijo Chuang.

“Tanto el gobierno como Twitter necesitan una forma de salvar la cara”, dijo Chuang al jurado. EE.UU. dejó escapar a su principal sospechoso y Twitter arrojó a Abouammo “debajo del autobús”, dijo. “¿Este caso es lo mejor que se les ocurrió?”, preguntó.

Abouammo y sus abogados declinaron hacer comentarios sobre el veredicto.

El caso es US v. Abouammo, 19-cr-00621, Tribunal de Distrito de Estados Unidos, Distrito Norte de California (San Francisco).

Lea más en Bloomberg.com