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Latinos y afroamericanos de Chicago son más propensos a ser víctimas de hechos de violencia con armas de fuego o testigos de tiroteos en comparación con los ciudadanos blancos, según da cuenta una publicación de la Asociación Médica Estadounidense (JAMA, por sus siglas en inglés).
El relevamiento que tuvo dos etapas, debido a que la curva de violencia experimentó dos momentos distintivos, es una investigación de largo plazo que hizo el seguimiento de los participantes desde su infancia hasta los 40 años en la ciudad de Chicago, más precisamente entre 1995 y 2021.
En la primera oleada (a mediados de la década de 1990) donde participaron 2.418 hombres y mujeres en partes iguales, los encuestados varones tenían muchas más probabilidades que las encuestadas de haber sido tiroteados y moderadamente más probabilidades de haber visto un tiroteo.
Los negros experimentaron tasas más elevadas de haber sido tiroteado, de haber visto a alguien tiroteado, y de tiroteos cercanos.
Por su parte los encuestados hispanos experimentaron tasas más altas en la exposición a la violencia y en estar cerca de un tiroteo.
La violencia en cifras
Al cumplir 40 años, alrededor del 56% de los encuestados negros y casi el 55% de los latinos dijeron que habían visto a alguien más recibir un disparo, en comparación con casi el 26% de los encuestados blancos, dice el informe.
El 6,4% de todos los encuestados dijeron que les habían disparado a los 40 años, pero la disparidad étnica muestra que alrededor del 7% de los negros y latinos dijeron que les habían disparado, en comparación con el 3,1% de los participantes blancos.
Por otro lado, “los encuestados nacidos a mediados de la década de 1990 que crecieron en medio de grandes descensos en los homicidios, pero llegaron a la edad adulta durante los picos de violencia con armas de fuego en la ciudad y a nivel nacional en 2016, tenían menos probabilidades de haber visto a alguien recibir un disparo que los nacidos a principios de la década de 1980 que crecieron durante el pico de homicidios a principios de la década de 1990. Sin embargo, la probabilidad de haber recibido un disparo no difirió significativamente entre estas cohortes”, dice JAMA.
Es así que los encuestados hispanos y de raza negra tuvieron doble propensión que los blancos a ser víctimas directas de esa violencia
Las disparidades entre sexos en cuanto a presenciar y estar cerca de la violencia con armas de fuego eran pequeñas, pero los hombres corrían un riesgo significativamente mayor de recibir un disparo que las mujeres. Las diferencias de cohorte fueron más pronunciadas en el caso de haber visto disparar a alguien; en particular, la cohorte más joven de nuestro estudio tenía menos probabilidades de haber visto disparar a alguien que la cohorte más joven.
Aunque el informe se circunscribe a Chicago, las tasas y tendencias de violencia en la tercera ciudad más grande de Estados Unidos pueden ser paralelas a las de otras ciudades importantes, sentencia JAMA.
Casi 21 000 personas en los EE.UU. murieron a causa de la violencia con armas de fuego en 2021, una tasa de 6,3 muertes por cada 100.000 habitantes.
