Buenos Aires — Las encuestas indican que el espacio con mayor intención de voto es Juntos por el Cambio. Falta mucho. Pero hay chances concretas de que Juntos por el Cambio, la principal fuerza opositora, sea la vencedora en las elecciones presidenciales de este año y regrese en diciembre a la Casa Rosada. En ese escenario, los referentes energéticos de esta coalición analizaron la herencia que podrían recibir de la gestión de Alberto Fernández con dos premisas: el potencial hecho realidad de Vaca Muerta y un problema que no se ha resuelto, el de los subsidios a la energía.
Nicolás Gadano es economista y responsable de energía del principal Think Tank del PRO, la Fundación Pensar. Participó de la Experiencia Idea Energía que se llevó a cabo en Neuquén junto a otro referente del área de la oposición: Gustavo Lopetegui, exsecretario de Energía de la administración Mauricio Macri.
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La herencia positiva
Tanto Gadano como Lopetegui, destacaron aspectos positivos de estos cuatro años en lo que respecta a la materia energética e hidrocarburífera. “Hay elementos en los que se ve continuidad, por ejemplo el offshore (exploración en altamar), es valioso el plan gas, porque da un horizonte de certidumbre simultáneamente a la demanda y a los productores”, dijo Gadano, quien también destacó que el ministro de Economía, Sergio Massa “esté mirando la posibilidad de avanzar en un segundo tramo (del gasoducto Néstor Kirchner) con financiamiento privado”.
Lopetegui, en diálogo con Bloomberg Línea, mencionó también el desarrollo del litio y el trabajo en conjunto realizado tanto por Nación como las provincias para incentivar las inversiones y las exportaciones. “Argentina se está manejando bien, es de los países que más está aumentando proyectos, sobre todo comparado con Chile y Bolivia”.
Respecto a los proyectos, principalmente en la órbita del kirchnerismo, de sumarle -aún más- valor agregado a la producción de litio, Lopetegui señaló que “es poner el carro delante de los caballos”. “Ya se agrega valor. El litio es el 8% del costo de una batería y 92% de otras cosas, entre ellas, inversiones de capital gigantescas. Desarrollemos el litio y ya veremos hasta donde podemos llegar en la cadena de valor”, explicó.
La herencia negativa
Como si fuera un deja vu de los inicios de la gestión de Mauricio Macri, entre los principales déficits que los referentes de Juntos por el Cambio observan en materia energética, se encuentra el desfase de los precios de la energía y los subsidios en la distribución y el transporte.
“Tenemos que volver a instalar que la energía se tiene que pagar por lo que vale”, dijo Gadano. En 2016, el aumento en las tarifas fue de las políticas que más resistencia política tuvo el entonces oficialismo.
En la misma línea, Lopetegui dijo: “Cuando llegamos al gobierno había subsidios a la energía por US$18 mil millones y el último año de nuestro gobierno eran US$6 mil millones, y ahora volvemos a un número que se parecerá más a US$18.000 millones”.
Según el exsecretario, “si no se corrigen esos subsidios el orden macroeconómico es muy difícil y sin ese orden el sector no va a poder aprovechar las oportunidades que existen de generar más empleo e inversiones”.
Gadano explicó que estas distorsiones, sumado a los controles en los precios del combustible, “te dejan dos problemas, no resolvés la inflación y distorsionas precios relativos en un sector”.
El economista reconoce que será uno de los principales desafíos que enfrentará la próxima administración: “El desafío de corrección de los precios relativos de normalización de los precios de energía, para un próximo gobierno, es dificilísimo, porque tiene consecuencias sociales muy complejas, pero hay que hacerlo, encararlo”.
