Bloomberg — El Museo Metropolitano de Arte va a retirar el nombre de la familia Sackler, que ganó miles de millones vendiendo opioides y contribuyó a una asombrosa crisis de salud pública en Estados Unidos, de algunos de sus espacios de exposición más emblemáticos.
El museo neoyorquino dijo que sus nombres serían retirados de las salas, incluyendo la que alberga el Templo de Dendur, según un comunicado del jueves. La decisión se tomó de acuerdo con las familias de Mortimer Sackler y Raymond Sackler.
“Nuestras familias siempre han apoyado fuertemente al Met, y creemos que esto es lo mejor para el Museo y la importante misión que cumple”, dijeron los descendientes de Sackler en un comunicado. “Las primeras de estas donaciones se hicieron hace casi cincuenta años, y ahora estamos pasando la antorcha a otros que podrían desear dar un paso adelante para apoyar al Museo”.
Los Sackler fueron durante décadas figuras destacadas de la filantropía mundial, con su nombre estampado en museos de todo el mundo. Pero cuando los Sackler, cuya empresa Purdue Pharma LP produjo el adictivo analgésico OxyContin, se convirtieron en la cara pública de la crisis de los opioides, organizaciones como el Met y el Louvre fueron criticadas por llevar su nombre.
En septiembre, un juez de bancarrota estadounidense aprobó el plan de Purdue para resolver miles de demandas por opioides que la llevaron a la insolvencia. Como parte del acuerdo, los Sackler aceptaron aportar unos US$4.500 millones, vender sus participaciones farmacéuticas y renunciar a su capital en Purdue. (Los propios Sackler no son objeto del procedimiento de quiebra de Purdue Pharma, pero algunos miembros de la familia están citados junto a la empresa en las demandas civiles).
A cambio, recibirán inmunidad de por vida de la responsabilidad civil por su papel en la crisis de los opioides y conservarán en gran medida la mayor parte de su fortuna, estimada en US$11.000 millones, según el Índice de Multimillonarios de Bloomberg.
Mientras que el Met, el Louvre y otras instituciones, se han despojado del nombre en los últimos años o se han distanciado de la familia, el nombre permanece en la Biblioteca Sackler de Oxford y en el Instituto Raymond y Beverly Sackler de Ciencias Biológicas, Físicas y de Ingeniería de Yale.
“El Met se ha construido gracias a la filantropía de generaciones de donantes, y los Sackler han sido uno de nuestros colaboradores más generosos”, dijo Dan Weiss, presidente y CEO del Met, en el comunicado.
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Este artículo fue traducido por Estefanía Salinas Concha.
