Bloomberg — El Kremlin está considerando un plan para suspender las elecciones regionales previstas para septiembre en medio de preocupaciones sobre la creciente tensión social debido a la guerra en Ucrania y las sanciones impuestas por Estados Unidos y sus aliados, según personas familiarizadas con las discusiones.
La propuesta podría ser presentada formalmente al presidente Vladímir Putin tan pronto como el miércoles, cuando tiene previsto reunirse con los legisladores en San Petersburgo, informaron los diarios Kommersant y RBC.
Las discusiones son un indicio de la preocupación del Kremlin por los crecientes costos, tanto políticos como económicos, de la invasión, que entra en su tercer mes sin señales de un final. Por el momento, las encuestas muestran que el apoyo a Putin se ha acercado a niveles récord, pero el aumento de las pérdidas en el campo de batalla y el empeoramiento del nivel de vida podrían afectarlo.
“En medio de la presión por las sanciones y el inevitable deterioro de las condiciones sociales, es necesario ajustar los procesos electorales al trabajo estable y predecible del sistema político de manera que minimicen el impacto de los factores negativos en la formación de autoridades de Gobierno en los distintos niveles”, dijo Konstantin Kostin, jefe de un grupo de expertos que trabaja en estrecha colaboración con el Kremlin.
Se espera que la economía de Rusia registre una de las peores contracciones desde la década de 1990 a medida que aumenta el impacto de las sanciones.
Incluso con un estricto control del sistema político y la marginación de los opositores, el Kremlin ha tenido dificultades en ocasiones para garantizar que sus candidatos favorecidos ganaran las elecciones. Putin abolió las elecciones directas para gobernadores en 2004, después del mortífero ataque terrorista en Beslan, pero fueron restauradas bajo un control más estricto del Kremlin en 2011.
