Un potente terremoto de magnitud 6,8 grados en la escala de Richter sacudió este viernes a Marruecos, cerca de las 11:00 pm (hora local). El movimiento telúrico habría dejado hasta el sábado, más de 2.000 personas muertas y unas 1.400 con heridas graves en diferentes localidades marroquíes, según autoridades del país.
El epicentro del sismo se situó a 71 kilómetros al suroeste de la ciudad Marrakech y a una profundidad de 18,5 kilómetros, según informó el Servicio Geológico de Estados Unidos, que también indicó que se trata del temblor más fuerte que ha afectado la zona en más de 120 años.
Los heridos, de diversa gravedad, fueron trasladados a centros hospitalarios, indicó el Ministerio del Interior, que añade que también hubo daños materiales en zonas no habitadas.
De acuerdo con reportes preliminares, el movimiento derrumbó algunos edificios en el casco antiguo de Marrakech, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. La mayoría de los daños se produjeron en pequeñas ciudades y poblaciones cerca de las montañas de Alto Atlas, a las afueras de Marrakech y Taroudant, donde existen muchas viviendas de adobe y de difícil acceso, según Bloomberg.
El Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS, por sus siglas en inglés) dijo que se trata del sismo más fuerte que ha afectado el área en más de 120 años. El terremoto se sintió en Argelia, Portugal y España, incluso.
El rey Mohammed VI declaró tres días de luto nacional. En tanto, distintos mandatarios internacionales expresaron sus condolencias y ofrecieron ayuda a Marruecos para enfrentar la tragedia. El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, quien se encuentra en Nueva Delhi (India) por la cumbre del G20, manifestó en un comunicado sentirse “profundamente entristecido”.
También Emmanuel Macron, presidente de Francia, envió sus condolencias por la tragedia y dijo estar disponible para ofrecer asistencia inmediata al país africano.
La televisión estatal Al-Aoula mostró varios edificios derrumbados cerca del epicentro del sismo.