Bloomberg — La Reserva Federal dijo que está intensificando el escrutinio de la participación de los prestamistas en los activos digitales, la última medida de los reguladores estadounidenses para limitar la participación de los bancos en cripto.
La Fed dijo el martes que había establecido un programa para reforzar la supervisión de las actividades relacionadas con los activos digitales y la tecnología blockchain por parte de los prestamistas que supervisa. En el último año, el banco central y otros reguladores han advertido repetidamente a los prestamistas que tengan cuidado con los riesgos asociados a esta clase de activos.
El programa también se centrará en las asociaciones de los bancos con empresas que no son prestamistas, como las empresas fintech, para prestar servicios a los clientes. “El objetivo del programa de supervisión de actividades novedosas es fomentar los beneficios de la innovación financiera al tiempo que se reconocen y abordan adecuadamente los riesgos para garantizar la seguridad y solidez del sistema bancario”, dijo la Fed en un comunicado.
En enero, la Reserva Federal, la Federal Deposit Insurance Corp. y la Oficina del Interventor de la Moneda expresaron su preocupación por la volatilidad de esta clase de activos. Las autoridades señalaron la importancia de evitar que los riesgos que no pueden controlarse se trasladen al sistema bancario.
Desde entonces, los reguladores federales han puesto en marcha políticas que, según muchos partidarios de las criptomonedas, son hostiles a esta clase de activos. Además de las advertencias cada vez más directas, los organismos de control denegaron la solicitud de una empresa de criptomonedas para convertirse en miembro del sistema de la Reserva Federal.
“El temor es que el compromiso con activos tan volátiles pueda poner en peligro el sector bancario tradicional”, dijo Howard Fischer, socio con sede en Nueva York del bufete de abogados Moses Singer. Es poco probable que esa opinión cambie a menos que el espacio de los activos digitales se regule más como las empresas financieras tradicionales, dijo.
La Fed también dijo el martes que los bancos estatales deben obtener la aprobación del banco central antes de emitir, mantener o realizar transacciones en stablecoins para facilitar los pagos. La medida podría afectar a los planes de los prestamistas con sede en estados que se consideran más favorables a las criptomonedas, pero que siguen siendo supervisados por el banco central.
En virtud de las nuevas directrices, los bancos con estatuto estatal supervisados por la Fed tendrían que demostrar que cuentan con las salvaguardias adecuadas para mitigar los riesgos, incluidos los riesgos de liquidez, ciberseguridad y financiación ilícita.
También tendrían que demostrar que pueden supervisar continuamente esos aspectos. Los prestamistas tendrían que notificar a la Reserva Federal antes de emprender determinadas actividades con stablecoin, y esperar hasta haber recibido “una notificación escrita de no objeción de supervisión” antes de proceder.
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