Bloomberg — En octubre cayeron las ventas de viviendas nuevas en Estados Unidos, tras una revisión a la baja del mes anterior, ya que las tasas hipotecarias, elevados durante décadas, pesaron sobre la demanda.
Las compras de viviendas unifamiliares nuevas disminuyeron un 5,6% hasta un ritmo anualizado de 679.000 el mes pasado, según mostraron el lunes los datos del gobierno. El ritmo incumplió todas las estimaciones de una encuesta de Bloomberg entre economistas.
A pesar del descenso, las ventas de viviendas nuevas han aumentado en general durante el último año, ya que los elevados costes de los préstamos disuaden a los propietarios de mudarse. Aun así, los constructores han tenido que engatusar a algunos compradores con incentivos financieros sobre los precios y los tipos en medio de la crisis de asequibilidad.
Las tasas hipotecarias alcanzaron el mes pasado un máximo cercano al 8% y desde entonces han retrocedido ante la expectativa de que la Reserva Federal se acerque al final de su ciclo de endurecimiento. Si el retroceso continúa, eso podría impulsar el inventario de reventa y la demanda de los compradores.
El precio medio de venta de una vivienda nueva cayó a US$409.300, según el informe de la Oficina del Censo y el Departamento de Vivienda y Desarrollo Urbano. A pesar del descenso, que ahora es de más del 17% respecto a hace un año, los precios siguen estando muy por encima de los niveles anteriores a la pandemia.
Las existencias de viviendas nuevas aumentaron por tercer mes consecutivo hasta el nivel más alto desde enero. Las ventas cayeron en el Medio Oeste hasta el nivel más bajo en casi un año y también disminuyeron en el Oeste.
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